Las nuevas cámaras para controlar el tráfico y sancionar a quienes se salten señales de stop y semáforos en rojo han dado en apenas seis días, del 29 de agosto al 4 de septiembre, motivos suficientes de su razón de ser.

En este tiempo, apenas una semana, estos dispositivos han cazado en los conflictivos cruces de las calles Sant Rafael con Plus Ultra, la avenida de Alacant con Magistrat Català y la Rioja con Olm, en la playa, a 1.694 conductores cometiendo infracciones de tráfico.

En concreto, este sistema estima que hay un goteo de 26 vehículos al día que se saltan el semáforo rojo de Sant Rafael, 49 que hacen caso omiso del de la avenida de Alacant y la sorprendente cifra de 214 coches y motos que no realizan el stop de la calle La Rioja cruce con Olm, junto a la plaza Castell de la playa.

Si estas infracciones se hubieran traducido en multas, el ayuntamiento de Gandia habría recaudado en solo seis días más de medio millón de euros, puesto que cada una de estas sanciones suponen 300 euros más la retirada de tres puntos del permiso de conducir.

Son datos cuanto menos preocupantes para el tráfico de la ciudad que, de momento, según indicó el Coordinador General de Movilidad, Javier Reig, solo sirven "para concienciar a los ciudadanos", puesto que los conductores que han sido cazados por estos dispositivos no serán sancionados. Pero eso era hasta ahora. El Gobierno local ya ha anunciado que a partir del próximo viernes, 13 de septiembre, quien se salte uno de estos puntos señalados recibirá en su casa la correspondiente sanción.

Cabe recordar, en todo caso, que este dinero no sería íntegro para el ayuntamiento, pues un 30% del mismo se lo llevaría la empresa que instaló las cámaras, Omnivisión Seguridad, a merced de lo que estipula el contrato firmado por ambas entidades. Eso sí, según el acuerdo, la mercantil no percibiría en ningún caso más de 72.000 euros.

Desde el Gobierno de Gandia insistieron en que estas cifras son un aviso, dado que "pretendemos que todos los conductores respeten la señalización y entre todos evitemos accidentes y, sobre todo, que tengamos desgracias personales que lamentar".