La supresión de algunos trenes en la línea 1 durante los meses de verano, especialmente a primeras horas de la mañana, ha provocado la masificación y "el hacinamiento" que en algunos casos se han llegado a traducir en mareos a causa del calor, según han denunciado usuarios de puntos como la Canyada o de Torrent. En algunos tramos horarios de alta frecuencia de uso, los viajeros han tenido que esperar durante varios meses hasta 40 minutos para subir al metro. Algunos de estos casos se produjeron el pasado viernes por la mañana en el trayecto que partió de la estación situada en el término de Paterna cuando pasaban unos minutos de las nueve horas. Al llegar a la Canyada el metro ya estaba lleno y no era posible sentarse "por la supresión de trenes" a lo que se sumó el hecho de que el convoy no tenía aire acondicionado "por los recortes". Todo ello provocó que algunos de los pasajeros se marearan.