Un turismo embistió en la tarde del martes un carro que circulaba sin iluminación por la carretera de Albalat. Las dos personas que iban en él resultaron heridas y fueron trasladadas al hospital. El animal sufrió lesiones irreversibles y agonizó durante cinco horas hasta que fue sacrificado. El cadáver permaneció en la cuneta hasta que una empresa especializada se hizo cargo, ya en la tarde de ayer.

La demora en retirar el cuerpo pero, especialmente, haber encontrado el animal cuatro horas después del accidente abandonado en la cuneta todavía con vida ha provocado una profunda indignación en las protectoras de animales que están dispuestas a movilizarse "para concienciar a las autoridades de que no pueden quedarse impasibles en un caso así". La Guardia Civil tiene previsto abrir diligencias penales para valorar si lo sucedido puede ser constitutivo de un delito de maltrato animal ya que, según indicaron fuentes del cuerpo, familiares de los propietarios del carro se habían comprometido con los agentes del Seprona a hacerse cargo del caballo herido.

Nunca había sucedido y el Ayuntamiento de Alzira no contaba con ningún protocolo de actuación. La concejal de Sanidad, Mercedes Bañeres, emitió ayer un comunicado para relatar lo sucedido, defender el trabajo realizado por los funcionarios frente a las críticas recibidas -especialmente a través de las redes sociales- y anunciar que ya se ha empezado a redactar un protocolo para dar una respuesta más ágil ante una situación similar.

El accidente se produjo sobre las 18,30 horas y, tras la limpieza y reapertura de la carretera sobre las 20,40 horas, los cuerpos de seguridad fueron abandonado la zona ante el compromiso de un familiar del dueño del carro, al que el Seprona llevó hasta el caballo, de hacerse cargo. Carmen Martí, de la protectora Adopta Mascota de Algemesí, dio la voz de alarma pasadas las 22,30 horas de que el caballo se encontraba abandonado y todavía con vida en la cuneta.