El alcalde de Paterna, el popular Lorenzo Agustí, ha anunciado por sorpresa en el pleno ordinario, tras el debate y aprobación de todos los puntos del orden del día, su dimisión del cargo, que ostentaba desde 2007 con amplia mayoría absoluta. Agustí, que ha realizado un emotivo discurso al final de una larga sesión, casi con lágrimas en los ojos, ha aprovechado para repasar su trayectoria y anunciar que la sucesora será la primera teniente de alcalde Elena Martínez, para la que ha pedido a sus compañeros un «apoyo sin fisuras». «Hemos tratado de gobernar para todos», ha manifestado el mandatario en su intervención. La dimisión la formalizará mañana. Tras el pleno ha alegado razones personales para dar este paso, a menos de un año de las elecciones municipales.

Lorenzo Agustí se presentó por primera vez a la alcaldía de Paterna en 2003, aunque en aquella cita electoral ganó el PSPV-PSOE las elecciones y gobernó los cuatro años a través de un pacto con Esquerra Unida. Agustí repitió como candidato en 2007, tras cuatro años de dura oposición al fallecido socialista Francisco Borruey, y logró un resultado histórico, al conseguir 15 de los 25 concejales de la corporación municipal, frente a los siete de su principal competidor. En 2011, los populares con Agustí al frente obtuvieron 14 ediles.

Respecto a su gestión, en su primera etapa se caracterizó por realizar públicamente numerosos gestos que le desmarcaban de la línea oficial de su partido y potenciaban su actitud rebelde, como fueron acudir a la toma de posesión con una pegatina en la solapa contra las talas en el bosque de la Vallesa de Paterna, participar en una concentración ciudadana contra el segundo by-pass o convocar una encuesta para decidir si se implantaban los «bous al carrer». Esta actitud le convirtió en un alcalde muy carismático en diferentes ámbitos, aunque también le generó recelos en el seno del Partido Popular y en algunos sectores de la población, que entendieron que los gestos no siempre se tradujeron en hechos.

En su segundo mandato, la gestión ha estado encaminada a fomentar los grandes proyectos empresariales, entre ellos una zona franca y el gran centro comercial Puerto Mediterráneo „que aún no se han materializado„ así como el intento de que se implantara la multinacional Ikea „que finalmente fue a Alfafar„ o la llegada de la firma Bauhaus. En el plano negativo, este segundo mandato ha sido también el del desmantelamiento de la mayoría de empresas municipales, entre ellas alguna que él mismo creó y que han tenido muy corta vida.

En los siete años en que ha estado al frente de la alcaldía, Agustí ha realizado diversos proyectos de infraestructuras con los fondos de los Planes del Gobierno y de la Generalitat Valenciana. Entre ellos está la construcción del Auditorio por el que ha acabado imputado por una presunta irregularidad que afectaría a la tramitación administrativa del proyecto y que denunció el grupo socialista.

En los últimos meses, Lorenzo Agustí ha sido también imputado por el contrato de 600.000 euros con el que encargó a la empresa municipal de servicios la promoción de la zona franca „y que incluyen sus diversos viajes a China„, a raíz de una denuncia del grupo Compromís. Por este mismo asunto están también imputados cinco concejales de su equipo.

Dentro del Partido Popular, el nombre de Lorenzo Agustí ha sonado el diversas ocasiones para cargos de diputado autonómico o provincial pero finalmente no ha pasado del plano municipal. Sus acciones constantes para desmarcarse de sus superiores „en 2011 renunció a hacer campaña electoral y tampoco colgó ni un sólo cartel de Francisco Camps„, el hecho de no estar enmarcado en ninguna corriente concreta y otros factores, han frustrado hasta ahora sus aspiraciones más allá de Paterna.

Lorenzo Agustí tiene 44 años y es arquitecto de profesión. Durante años ejerció en la empresa familiar y varios años antes de ser alcalde fue asesor del presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps. Está casado y es padre de tres hijos.