Los amantes de la micología tienen a partir de mañana en Sagunt una extensa variedad de actos relacionados con esta disciplina que se prolongarán hasta el próximo fin de semana.

Las XVII Jornades Micològiques volverán a reunir a numerosos aficionados de la comarca entorno a actividades y gastronomía, en una cita que ya ha conseguido formar a muchos «entendidos». Esta disciplina era poco conocida en la comarca hasta hace 20 años, a diferencia de otros territorios valencianos, pero muchos aficionados superan ya la veintena de especies conocidas, incluyendo tanto las comestibles como las tóxicas o venenosas, en una espectacular progresión gracias a esta iniciativa durante los últimos 17 años», aseguran desde el Centre d'Estudis que organiza los actos junto a la asociación Amics dels Bolets de Sagunt. «¡Ahora la gente incluso llama a las variedades por su nombre científico en latín!», añaden.

La primera de las actividades programadas, que tuvo lugar ayer, fue la salida a la montaña para recolectar las setas que mañana identificarán y catalogarán los participantes en un taller, para exponerlas por la tarde en la casa Capellà Pallarés de Sagunt, en la muestra que abrirá sus puertas a las 20 horas. La exposición estará abierta al público en general, en el horario habitual del centro, mañanas y tardes. Una cita a la que es habitual que asistan los escolares del municipio, para iniciarse ya de pequeños en la micología. El martes, a las 22 horas y también en la casa Capellà Pallarés, un miembro de la Societat Micològica Valenciana ofrecerá una conferencia sobre la existencia de metales pesados en hongos silvestres comestibles, de gran ayuda para su correcta identificación.

El próximo fin de semana hay dos citas gastronómicas: una cena en Faura, donde se entregarán los premios Amanita Caesarea y Amanita Phalloides a la mejor y peor iniciativa en la comarca, y una comida en Sagunt que pondrá el punto y final a las jornadas. Las setas y los hongos serán el ingrediente principal.