Así pues, la lenta y pesada digestión que efectúa por el exceso de oferta y el escaso crédito hipotecario provoca que los 47 municipios de la comarca contabilizaran en el tercer trimestre del año un total de 509 transacciones, según el Ministerio de Fomento, una cifra relativamente baja.

Esto supone un nuevo empeoramiento respecto a los tres meses anteriores aunque cabe señalar que el tercer trimestre del ejercicio no suele ser el que más operaciones anota, sin llegar tampoco a ser equiparable este período con el inicio del año, cuando menos movimiento tiene el sector.

El dato es muy similar al del mismo trimestre de 2013 (505), resulta mejor que el del 2012 (425) y es peor que el del 2011 (577), ya en plena crisis tras el estallido de la burbuja inmobiliaria. Si desde abril hasta junio Sueca propició un fuerte impulso a la compra de viviendas con 120 operaciones, esta vez la capital de la Ribera Baixa ha dado un espectacular bajón al venderse solamente 44 casas en verano, un 63% menos, manteniéndose en niveles de 2013.