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Estudio

Sitúan la necrópolis de Oliva en el origen del sedentarismo de la humanidad

El CEIC confirma que el yacimiento, que data de hace 9.500 años, es de los más antiguos de Europa

Sitúan la necrópolis de Oliva en el origen del sedentarismo de la humanidad

Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha demostrado que la necrópolis del Collado, en Oliva, es la más antigua de la Península Ibérica. A esa misma conclusión llegó un estudio de la Universitat de Barcelona realizado en 2008 del que Levante-EMV informó en su día. La datación de los restos óseos de 10 de los 15 individuos enterrados en este conjunto funerario, con una antigüedad comprendida entre los 9.500 y 8.500 años, rompe con la idea de que los primeros cementerios ibéricos fueron los situados junto al río Tajo y el Sado, en Portugal. Los resultados, publicados en la revista Plos One, ratifican que la necrópolis olivense tuvo un uso intermitente durante mil años.

El empleo del Collado de Oliva como cementerio coincide en el tiempo con otros yacimientos mesolíticos en Europa, como los de Vedbaek (Dinamarca), Skateholm (Suecia) o Téviec y Hoëdic (ambos en Francia).

Hace unos 9.500 años, las últimas comunidades de cazadores-recolectores que ocupaban la Península Ibérica comenzaron a enterrar de forma sistemática en cementerios, un hábito que se vincula a la progresiva sedentarización de estas sociedades y a un cambio significativo en la relación de sus territorios con las actividades económicas.

Según las dataciones por carbono 14, los restos humanos más antiguos fueron enterrados en el sector sur del Collado, y los más recientes en la zona norte.«Es significativo que la mayor parte de estas sepulturas no se superpongan ni se corten unas a otras, lo que indica que posiblemente se empleó algún tipo de señalización para indicar las inhumaciones, que era reconocida y respetada mientras se mantuvo la función funeraria de este lugar», ha explicado el investigador del CSIC Juan Francisco Gibaja, de la Institución Milà i Fontanals.

En el yacimiento mesolítico del Collado, excavado en 1987 y 1988, se hallaron 15 enterramientos, cuatro son mujeres y siete hombres, otros dos probablemente hombres y los dos restantes un adolescente y un recién nacido. Algunos de ellos fueron enterrados con un sudario, saco o con algunos de sus extremidades atadas. El yacimiento es, además, un depósito de conchas, relacionado con el consumo de moluscos por estas comunidades, que vivían cerca del mar o de los estuarios. También cazaban en las montañas y realizaban útiles de piedra. «A veces enterraban a sus muertos en estos mismos lugares. Estos moluscos tenían una función de subsistencia, pese a que en algunas ocasiones utilizaran con fines ornamentales, indicó el investigador Gibaja.

El arqueólogo José Aparicio Pérez, que dirigió esta excavación hace casi 30 años, dijo que el Collado de Oliva es probablemente, el primer lugar donde se manifiesta el «antropocentrismo».

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