El proyecto de la Universitat de València para atender las dolencias oculares de los emigrantes haitianos en la república Dominicana ha finalizado con un balance de 1.500 atenciones en consulta, 7.200 revisiones oculares y 300 intervenciones quirúrgicas, todo ello entre 2011 y principios de 2015.
Esta iniciativa, cuya gestación se remonta a 2005 impulsada por el Fons Valencià per la Solidaritat, ha sido liderada por el editor y oftalmólogo de Xàtiva Antoni López Alemany, profesor titular de Óptica, Optometría y Ciencias de la Cisión de la UV.
En República Dominicana se da la paradoja de que reciben mucha inmigración „generalmente irregular„ pero al mismo tiempo se va mucha gente del país: un 74% de la población tiene un familiar trabajando fuera. La procedencia mayoritaria de los que llegan es de Haití, especialmente desde que la isla fue azotada por el terremoto de 2010.
La mayoría de estos inmigrantes trabajan en el cultivo de la caña de azúcar, una práctica peligrosa para la visión por las partículas que desprende el segado y porque no se toman ningún tipo de medidas de seguridad, explica López Alemany. En una situación tan empobrecida, además, la salud ocular está considerada secundaria y no hay cultura de la consulta médica, de las revisiones ni de la necesidad de llevar gafas, lo que agrava las dolencias.
Donación de material
López Alemany ha dirigido durante estos últimos cuatro años un dispositivo formado por siete personas que se han encargado específicamente de realizar revisiones optométricas. Se trata de profesionales voluntarios que han viajado a República Dominica en ocasiones costeando sus propios desplazamientos y estancia, y gestionando además la llegada de material tecnológico donado por instituciones españolas. Todo ello bajo el paraguas de la Fundació General de la Universitat de València. En colaboración con facultativos del país „y también desplazándose los propios médicos españoles„ se han realizado igualmente las intervenciones quirúrgicas.
