Un grupo de vecinos de Yátova ha manifestado públicamente su malestar porque el alcalde, Rafael Lisarde, se ha negado a cederles alguno de los locales municipales para reunirse. Según explicaron a Levante-EMV, este colectivo pretende constituirse en agrupación de electores y concurrir a las próximas elecciones, «lo que ha molestado a la máxima autoridad local».

Tras presentar un escrito en el consistorio, «se nos ha contestado con la negativa, que pensamos que se debe a que en una asamblea que si pudimos celebrar en un local municipal, llegamos a reunir a 200 personas».