Sólo los grandes almacenes sobreviven en la Ribera Baixa. Durante la temporada alta, Frutsol emplea a casi 400 personas y Greenmed a unas 700, según fuentes de UGT. Desde este sindicato calculan que en estos años habrán cerrado entre 10 y 15 almacenes en la Ribera Baixa, pero la cifra que apuntan otras fuentes es incluso más elevada. Explican que las plantillas estaban compuestas principalmente por gente ya mayor que en algunos casos se ha jubilado y en otros ha sida recolocada en empresas grandes de otras comarcas.

Aunque desde CC OO añaden que en muchos casos las pensiones que acaban cobrando son mínimas porque la mayoría de trabajadores eran fijos-discontinuos, que ni cobraban ni cotizaban lo suficiente. Además, este sindicato critica que las grandes cadenas de distribución han dejado precios de origen bajo mínimos. P. BOHIGUES/S. VIVES alzira