Chiva volvió ayer una situación surrealista. El PP logró conservar la alcaldía después de una extraña maniobra cuando todo apuntaba a que un pentapartito gobernaría ayer el ayuntamiento de la localidad de La Hoya de Buñol. Pero en el pleno de investidura, el giro fue de 180 grados. Con el acuerdo firmado el viernes por la tarde en la sede del PSPV-PSOE, Compromís, EU, Vinchi, Aduc, Juntos Podemos Más y los socialistas firmaron un acuerdo de gobierno que garantizaba que Emilio Morales (Compromís) sería el nuevo alcalde. En teoría reunían diez votos, más que suficientes para que el popular José Manuel Haro pasara a la oposición.

Pero era en teoría. Porque en la práctica todo pasó al revés. El bloque de las fuerzas progresistas sufrió la fuga de dos votos y se quedó con ocho. El PP decidió dar sus seis votos a Ciudadanos „que sólo tiene un edil„ , que sumados al del propio C´s y al de ADUC sumaron otros ocho. Como hubo empate, obtuvo la vara de mando la lista más votada: la del PP.

Intervención policial

El escándalo fue considerable y el pleno se convirtió en un caos que hizo necesaria la intervención de la Policía Local para que la situación no pasara de los insultos. De hecho, los ediles socialistas abandonaron el hemiciclo junto a los agentes de la Policía Local, ya que una parte del público les profería toda suerte de insultos al hacerles responsables de tan surrealista situación.

¿Quién cambió su voto? Emilio Morales, que hasta la mañana de ayer se veía alcalde de Chiva, aún no lo tiene claro. «No sabemos a ciencia cierta quién no ha respetado el acuerdo suscrito el viernes por la tarde. Teníamos diez votos comprometidos y nos hemos quedado con ocho. Ciudadanos, con 100 votos, recibe el apoyo del PP cuando me dijo que pensaba votarme. No tengo dudas de mi compañera de partido, de EU, de Vinci y de Juntos Podemos Más. Del resto....».

Manuel Verdeguer, de Alternativa Diseminados y Urbanizaciones (ADUC), afirmaba en el pleno que él no se había votado a sí mismo. La tensión contra los ediles del PSPV fue tal que tuvieron que publicar dos fotos en las que enseñan su voto al candidato de Compromís. Fuentes socialistas afirmaron que «el secretario repartió una sola papeleta por concejal con todos los ediles para que cada uno marcara al elegido. Y los dos ediles han enseñado su papeleta y no la podían cambiar porque no tenían otra».

Morales justifica la maniobra del PP de votar a C´s como «una manera de no dejar rastro. Si junta los votos en torno a Ciudadanos así no se sabe con exactitud la procedencia» y denunció que lo sucedido ayer «estaba ya previsto de antemano porque no es normal que antes de empezar el pleno hubiera 13 policías locales. Solo envías ese número de agentes porque sabes que puede haber incidentes». Morales señaló que «más que indignado lo que estoy es acostumbrado a las maniobras de José Manuel Haro. De este hombre a mi ya me extraña nada. Ahora vamos a tranquilizarnos y después veremos con más detenimiento lo que ha sucedido y actuaremos en consecuencia.

Haro no quiso valorar la situación producida ayer en el pleno y solo afirmó que «vamos a reflexionar sobre lo sucedido».