Colectivos animalistas como «Mis amigas las palomas» de Valencia y la Asociación sobre la igualdad animal, además de otras personas a título individual, se manifestaron ayer frente al campo municipal de tiro «La arboleda» (Llíria), en contra de la práctica del tiro al pichón.

El tiro al pichón es una actividad que consiste en coger a palomas jóvenes que son disparadas al aire, tars haberles arrancado la cola. Son proyectadas bien mediante un tubo, o con la mano, lo que es conocido como como «a brasa».

Según Datxu Peris, participante de la protesta, las escenas que se ven son «muy desagradables», con pichones aleteando en el suelo del campo sin poder moverse tras ser lanzados, rodeados de sangre, y agonizando hasta que fallecen, si no lo han hecho en el tiro. Los manifestantes reclaman que en lugar de que se lancen animales vivos que, además, no pueden dirigirse en el vuelo al no tener cola, se lancen platos o hélices.

Ayer, el alcalde de la localidad salió a dialogar con los congregados en la puerta,que fueron increpados por algunos usuarios.

En los últimos dos años se han realizado casi una decena de protestas en este y otros campos de tiro valencianos, en los que se realizan competiciones de este tipo.