La concejala de personal de Llíria, Isabel Aigües (PSPV), ha abierto una nueva crisis de gobierno en el ejecutivo local socialista al pedir en el pleno que se la libere al 100%, con un sueldo acorde a las delegaciones que desempeña. Aigües, a raiz de una pregunta planteada por Paco García, portavoz de Compromís, explicó en el último pleno de diciembre que considera que tiene que tener una dedicación remunerada, equivalente a la del portavoz socialista Ferran Pina, para gestionar el área de recursos humanos que implica la gestión de la plantilla municipal „«360 trabajadores más 75 del plan de empleo que acaban de entrar», dijo a Levante-EMV„, los cursos de formación, las relaciones y negociaciones con las centrales sindicales y el control de los funcionarios.

El alcalde socialista Manolo Civera gobierna en solitario con el único apoyo de su grupo municipal sin embargo en el referido pleno fue el más sorprendido junto al propio Ferran Pina por la solicitud de Isabel Aigües. Tanto que ni la propia interesada sabe qué procedimiento legal hay que seguir ahora. «El secretario „dijo a este diario„ tendrá que explicarnos si en el próximo pleno se debe votar mi liberación o cuál es la fórmula legal para acometerla». Porque está claro que repartir delegaciones y concejalías corresponde al alcalde pero las liberaciones y retribuciones se votan en pleno y necesitan mayorías amplias. Como el PSPV está en minoría sólo prosperaría la liberación si la apoyan Compromís „ahora en la oposición tras romper el pacto de gobierno„ y el PP. En el grupo socialista se ha entendido la petición de Aigües «como un pulso al alcalde» y no se comprende que se compare «con otros compañeros porque hay otros concejales del gobierno que también merecen liberarse al 100%». La edila de personal dijo que si no se le asigna este sueldo, que cree que le corresponde «por las responsabilidades» que tiene y «por criterios objetivos», ha anunciado que seguirá igual. «No voy a dimitir ni me iré al grupo mixto», señaló. Respecto a si está teledirigida por Compromís, finalizó: «No soy persona que se deje manejar».