La reproducción del águila pescadora es un hecho que no se produce desde hace casi cien años en el marjal de Almardà. Sin embargo, volver a conseguirlo es el objetivo que se ha marcado el Grupo de Estudios de Rapaces (GER) de Vila-real en esta zona húmeda de Sagunt.

Los programas de reintroducción de esta especie amenazada que se están llevando a cabo en la península con especial éxito en Andalucía han servido de base para esta iniciativa local, que cuenta con el apoyo de la Conselleria de Medio Ambiente, tal y como ha adelantado a Levante-EMV la administración autonómica.

Desde el GER matizan que no se trata de una reintroducción, ya que la especie se avista todos los inviernos en el humedal, sin embargo, ya hace casi un siglo que no nidifica, una tendencia que están dispuestos a cambiar.

El proyecto consiste en la instalación de señuelos por el marjal a modo de figuras de porcelana a imagen y semejanza de una águila pescadora real, de 52 centímetros, que es lo que suele medir esta rapaz. A esto se añadirán unas plataformas con nidos distribuidos por distintas zonas para poder atraer a la especie «e invitarla a que se quede y se reproduzca», comentaba Fernando Ramia, uno de los portavoces del GER.

Sin embargo, pese a que los señuelos y las plataformas están preparadas para el inicio del programa, «hay un escollo. Para llevar a cabo esta iniciativa necesitamos contar con espacios más amplios, libres de caza. Hay que estudiar muy bien la compartimentación de espacios donde se caza con los protegidos y esto no está claro porque casi todo el humedal está dentro de coto de caza», comentaba Ramia. Aunque no se ha hablado de plazos, el GER espera que sea lo antes posible, ya que existe el compromiso de la administración autonómica para solucionarlo.

La situación de esta ave en el Mediterráneo es «crítica», y aunque tiende a la recuperación, en España su población no supera las 30 parejas. El buen estado de las aguas del marjal de Almardà, su reserva de alimento para esta especie en vías de extinción y su ubicación han sido factores determinantes en la elección del humedal para este proyecto con el que se espera ver pronto pollitos de águila pescadora en esta zona húmeda.

La reintroducción de la especie en Andalucía en 2002, donde había dejado de criar desde los ochenta, ha dado sus frutos, ya que en 2014 ya se contaban 11 parejas reproductoras. Desde el GER esperan que su proyecto en Sagunt consiga también buenos resultados y finalmente se puedan avistar señales de cría.

Una especie que dejó de reproducirse en España en 1983

El águila pescadora es una rapaz de la familia Pandionidae, que se extinguió en la Península Ibérica como reproductora en 1983. Catalogada como ave amenazada y en vías de extinción, vive normalmente en costas rocosas, pasa la mayor parte del invierno en África y regresa a Europa en primavera. Su situación crítica a causa de la fragmentación de la población ha promovido diferentes acciones para su reintroducción en el norte (Asturias) y sur de España (Andalucía). Una de las características más destacadas de esta rapaz es su dedo exterior que le permite cazar por delante y por detrás, muy útil para el pescado resbaladizo del que se suele alimentar.