Se trata de aprovechar el encanto de las comarcas para sacarlo a la luz y convertirlo en productos turísticos. Para todo el año. En la costa y en el interior. Ese es el objetivo que persigue la Fira de les Comarques, que comenzó ayer en la Plaza de Toros de València con el objetivo de «invitar» al turista a conocer las comarcas del territorio, su oferta turística, su gastronomía y el sinfín de actividades que se pueden desarrollar en un «territorio único que supone una elección turística especial».

En la Fira de les Comarques, además, está prohibido el aburrimiento. Por ello, los asistentes pueden desde jugar a paddle surf -en una piscina instalada en la arena del coso- hasta practicar escalada en un rocódromo, pasando por visitas virtuales a los principales recursos patrimoniales o desgustar productos típicos.

La música en directo de Borja Penalba y Mireia Vives dió el pistoletazo de salida a la cita turística con la que València Turisme abre el verano. El presidente de la Diputació, Jorge Rodríguez, inauguró ayer el «mejor escaparate» de la Comunitat Valenciana y especialmente, de la provincia de Valencia, para dar a conocer sus «muchos encantos», tanto de playa como de interior. Es más, apostó por la desestacionalización del turismo e insistió en la complementariedad para ofrecer paquetes con turismo de playa e interior y que «los encantos se conviertan en productos turísticos».

Escaparate de servicios

Así, y durante todo el fin de semana, el coso de la calle Xàtiva es el escaparate de los nuevos servicios y productos turísticos valencianos, dispuestos en las 13 áreas comarcales del exterior de la plaza de toros, y en las tres zonas de turismo activo, gastronómico y cultural habilitadas en el interior. La vicepresidenta Maria Josep Amigó resaltó el aprovechamiento de «todo el potencial de nuestros pueblos», mientras la diputada Pilar Moncho incidió en promocionar el territorio a través de productos turísticos «autóctonos y genuinos».