La línea ferroviaria Alcoi-Xàtiva volvió a estar operativa ayer tras los dos meses en que el tren no ha podido circular debido a las obras de mejora que se han estado ejecutando. Sin embargo, la prometida reducción del tiempo de viaje todavía tendrá que esperar como mínimo hasta el próximo otoño, toda vez que las distintas infraestructuras introducidas deberán superar primero un período de ajustes y rodaje.

Fue el pasado 12 de junio cuando Adif iniciaba las obras de mejora de la línea ferroviaria Alcoi-Xàtiva. El objetivo de la actuación, presupuestada en 5,5 millones de euros, pasaba por suprimir 11 limitaciones temporales de velocidad. En este sentido, a lo largo de estos dos meses se han efectuado tratamientos en seis trincheras, adecuado un terraplén, renovado cuatro tramos de vía en curva y mejorado cinco puentes metálicos.

Todo ello para aumentar los parámetros de seguridad y fiabilidad de la infraestructura y reducir los tiempos de viaje, según se ha prometido insistentemente, en unos diez minutos, lo que dejaría el trayecto en una hora y doce minutos.

Sin embargo, esa tan anhelada reducción, para un tren que sólo ha mejorado discretamente sus registros desde su inauguración a principios del siglo pasado, todavía tendrá que esperar.

Estas nuevas piezas que se han introducido en el trazado tendrán que superar un periodo de ajuste y rodaje, que podría prolongarse hasta el próximo otoño.

Mientras esa disminución de tiempo llega, la línea se reanudó este sábado por la mañana sin incidentes. Eso sí, con un reducido número de viajeros en los trenes que tuvieron servicio, un reflejo de la situación que vive la línea hasta Xàtiva desde hace años.

Con todo, las obras, que han servido para arreglar algunos tramos, son sólo un primer paso. Y es que sobre la mesa hay pendiente un convenio entre el Ministerio de Fomento y la Generalitat Valenciana para modernizar toda la línea que une Alcoi con Xàtiva, y así hacerla competitiva y atractiva.