La seguridad para evitar posibles atentados como el de Barcelona ha llegado también a los municipios -turísticos o no- dela C. Valenciana. Paterna, Gandia, Mislata o Ontinyent son algunas d elas localidades que ya han reforzado su seguridad con bloques de hormigón aunque otras como Xàtiva ya lo hicieron hace muchos días con motivo de su Fira d´Agost.

Así por ejemplo, en Mislata el ayuntamiento ha preparado un dispositivo sin precedentes para tratar de blindar la seguridad de la plaza Mayor. La concejalía de Seguridad Ciudadana va a instalar en un centenar de pretiles de hormigón, similares a las que se utilizan en las medianas de las carreteras para formar un cinturón de protección a lo largo de todo el recinto ferial. Del 29 de agosto al 2 de septiembre, la feria recibe unos 10.000 asistentes diarios.

El alcalde de Mislata, Carlos Fernández Bielsa, y la concejala de Seguridad Ciudadana, Mª Luisa Martínez Mora, visitaron la plaza Mayor para cerrar con el intendente principal jefe de la Policía Local, Juan José Gimeno, la distribución de los pretiles, conocidos en el argot policial con el nombre de «New Jersey».

El objetivo del ayuntamiento es que, con independencia de los elementos arquitectónicos de la plaza -que servirán para crear un primer cordón de seguridad- exista un perímetro completo de bloques de hormigón que impida un atentado como el de Barcelona, el de Niza o el de Berlín.

En Paterna, ayer se celebró ayer la Junta de Seguridad de la Cordà, presidida por el delegado del Gobierno en la C. Valenciana, Juan Carlos Moragues, y en la que también participaron el alcalde, José Antonio Sagredo, el director de Emergencias José María Ángel así como representantes del Cuerpo Nacional de Policía como de la Policía Local de Paterna, responsables de Guardia Civil, Bomberos, Sanidad y Protección Civil.

Más efectivos policiales

Entre las medidas tomadas para este año figura un incremento de un 20% de efectivos -una veintena de agentes de la Unidad de Prevención y Reacción de la Policía Nacional-para garantizar y velar por la seguridad. El dispositivo global estará formado por 120 personas. Además, al igual que en años anteriores se adoptarán otro tipo de medidas especiales como la colocación de bloques de hormigón para impedir el acceso de vehículos en las zonas de mayor afluencia. También se intensificarán los controles entre Policía Nacional y Policía Local.

Al mismo tiempo, habrá especial atención a la custodia del camión que transporta la pólvora, competencia que recae sobre la Guardia Civil como responsable de controlar la pólvora que se lance esa noche, más de mil kilos en los 70.000 cohetes que se quemarán en poco más de 20 minutos.

En el caso de Ontinyent, el consistorio tiene prevista instalar bloques de hormigón en las principales calles del municipio, tanto al inicio como al final, sobretodo por aquellas con gran alfuencia de gente con motivo de las fiestas de moros y cristianos. El gobierno que preside Jorge Rodriguez presentará hoy todo el dispositivo en rueda de prensa.

Pero fue Xàtiva la primera localidad en bindarse ante posibles agresiones en las fiestas. Uno de los puntos más calientes donde se intensificó la seguridad fue en la Plaza España. En lugar de los habituales bloques de plástico, el consistorio instaló este año barreras de hormigón para blindar uno de los accesos principales al tráfico, cerrado en varios sentidos. Además, según explicó el propio alcalde Roger Cerdà, se hizo en cumplimiento de la alerta 4 antiterrorista.

También Gandia instaló el pasado domingo bolardos y Maceterosa en el Passeig de les Germanies, Passeig Marítim i Rosa dels Vents, las vias más transitadas de la capital de la Safor. La propia alcaldesa Diana Morant lo anunció el viernes, el día después de los atentados de Barcelona.