Asegurado un caudal suficiente para atender las necesidades agrícolas, la Comunidad de Regantes ayuda a las necesidades de otras poblaciones cuando lo han requerido, siempre con el aval de la Confederación Hidrográfica del Júcar: tierras de Turís y urbanizaciones de la Sierra Perenxisa, Calicanto y otras del término de Godelleta viven hoy más tranquilos. Abren sus grifos y corre el agua. «Hace cinco años muchos chalets del término se quedaron sin suministro y las gentes se volvían a la capital. Hoy les hemos garantizado el agua. Nosotros sí creemos que el agua es de todos y hemos demostrado que puede triunfar la solidaridad sobre el egoísmo», dice el presidente que insiste en que resaltemos que se trata de una obra de la que «toda Godelleta puede sentirse muy orgullosa».
