La suspensión de las licencias de obra aprobada por el Ayuntamiento de Ayora que ha paralizado momentáneamente el proyecto de una macrogranja de cerdos en su municipio durará al menos un año. Así lo corrobora la orden validada por el pleno que, además, estima que el plazo de esta suspensión podría prorrogarse otro año más en caso de que se convoque o someta a información pública la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

El Ayuntamiento de Ayora -con la unanimidad de todos los grupos presentes en la corporación- aprobó esta medida para paralizar la instalación de una macrogranja porcina entre su término municipal y Alpera (Castilla-La Mancha). Esta explotación porcina, que actualmente ya funciona con 7.200 animales, pretende ampliar sus instalaciones hasta los 28.800 ejemplares, distribuidos en tres naves en Ayora y una en Alpera, lo que según el consistorio ayorino supondría la creación de alrededor de una quincena de empleos. El proyecto, con las licencias de obra suspendidas, está además a la espera de obtener la Autorización Ambiental Integrada (AAI) pertinente por parte de la Conselleria de Medio Ambiente.

Rechazo de los vecinos

La ampliación de la granja provocó rápidamente el recelo de buena parte de los vecinos de Ayora y Alpera, que se movilizaron en su contra por su posible impacto ambiental -sobre todo por los purines y la sobreexplotación de los acuíferos de la zona-. Ante ello, todos los grupos de la corporación local han mostrado su rechazo al proyecto: «Estamos seguros de que si esta actividad fuera buena para las personas y el medio ambiente (...) no se habrían fijado en nuestra población», advierten en el acuerdo aprobado.