La concejal del Ayuntamiento de Ontinyent detenida e interrogada por la Policía Nacional el pasado miércoles por su presunta implicación en la desaparición de un cheque de la Cruz Roja, aseguró ayer a Levante-EMV que todo responde a «un malentendido» y garantizó «que se va a aclarar». Virtudes Guillem, titular de Seguridad y de Policía Local en el consistorio ontinyentino e histórica expresidenta de Cruz Roja Ontinyent y actualmente voluntaria, podría haber cobrado un cheque de 600 euros. Ella aseguró ayer, tal como manifestó a otros medios, que lo cobró para entregarle después el dinero en efectivo al jardinero que trabaja en las instalaciones. El PP de Ontinyent pidió ayer su cese fulminante.

Compromís manifestó que es preferible esperar. Cruz Roja de Ontinyent denunció días atrás el extravío de un cheque al portador de 600 euros listo para ser cobrado. Poco después se supo que la concejal, con entrada en la institución ya que es voluntaria, lo había cobrado. La regidora aseguró ayer que la denuncia de Cruz Roja «es normal» y «es lo que tocaba hacer, ya que si ven que desaparece un cheque o lo que sea, lo lógico es que denuncien. Es más —añadió— yo sé cómo funciona la organización y hay un protocolo muy estricto en cuestión de dinero», señaló Guillem, que fue presidenta de Cruz Roja Ontinyent de 1999 a 2014. Sin embargo, la edil añadió que «denunciaron el hecho, en vez de solucionarlo internamente, porque no sabían que era yo. Si lo hubieran sabido o yo les hubiera avisado, este asunto quedaría en nada. Les hubiera dicho que he cobrado el dinero para pagar al jardinero y ya está». Y añadió que cobró el cheque para el jardinero «porque éste no podía hacerlo personalmente».