La cornisa de una fachada de un edificio en la calle Acequia de Pedralba, que cruza este municipio de los Serranos junto a la calle Colón y se ve obligada a absorber el tráfico pesado de los camiones, se desplomó el pasado martes. Aunque el incidente no provocó heridos, ha vuelto a sacar a colación la gran reivindicación de su ayuntamiento: la variante que permita sacar de su casco urbano, sobre todo, el paso de los camiones que van a la cooperativa. Y es que el alcalde, Roberto Serigó, achacó la caída de los cascotes a las vibraciones provocadas precisamente por estos vehículos.

Según explicó Serigó, el edificio dañado -que es propiedad del ayuntamiento- tan solo tiene en pie su fachada, ya que su interior se vació en anteriores legislaturas para crear viviendas de protección oficial de alquiler que jamás se han llegado a construir. La fachada se mantuvo en pie porque se encontraba protegida. El acalde explicó que el consistorio ya ha mandado reparar los daños, aunque incidió en que de haber pasado alguna persona o vehículo en ese momento por la zona podría haberse producido un accidente grave.

Ante esta situación, Serigó volvió a reclamar a la Diputación de València y a la Conselleria de Medio Ambiente que pongan soluciones a los problemas del municipio con el tráfico rodado. Y es que la variante sur, que en su día fue aprobada por la propia diputación e incluso por la vicepresidente del Consell, Mónica Oltra -que llegó a firmar la expropiación forzosa de los terrenos-, permanece paralizada desde 2016 por la revisión del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del Parc Natural del Túria, según la cual el nuevo vial afecta a terrenos del parque natural.

«No se han presentado estudios nuevos ni nada para dar una alternativa a la variante sur», criticaba ayer Serigó, que mantiene que las opciones que pasarían por el norte del pueblo «son todavía más agresivas para el medio ambiente». «Por lo menos que tengan algo claro. Están en un lapsus en el que en cualquier momento pasará una desgracia -en referencia al incidente del martes- y habrá algún responsable», añadió Serigó, a la vez que insistió en que el proyecto ahora paralizado «no tenía ningún informe negativo y contaba con el respaldo del PP y del PSOE». «Es Compromís quien está claramente en contra», apuntó.

Preguntado por si la destitución de Julià Álvaro como secretario autonómico de Medio Ambiente-a quien se le atribuyó la responsabilidad de la paralización del proyecto- había permitido avanzar en la búsqueda de soluciones, Serigó aseveró que «no ha habido cambios». «Fran Quesada -el actual secretario autonómico de Medio Ambiente- nos dijo que nos olvidáramos de que la carretera vaya por el sur», aseguró el alcalde.