La movilización de la Asociación Valenciana de Amigos del Ferrocarril (AVAF) ha conseguido evitar que un depósito de agua ferroviario de inicios del siglo XX ubicado en la estación de Chiva acabe descompuesto en una chatarrería. Así lo tenía previsto Adif, gestora de la infraestructura ferroviaria nacional, que iba a retirar la estructura por motivos de seguridad. Además, la operación ya tenía fecha: la madrugada del miércoles al jueves. Y su destino también estaba prefijado: que se convirtiera en chatarra. Sin embargo, la actuación de AVAF, con la colaboración del Ayuntamiento de Chiva y la propia Adif, ha dado sus frutos y el depósito será salvado, según confirmó a Levante-EMV Juan Luis Llop, directivo de la asociación.
«El viernes nos enteramos de que iban a derribar el depósito de agua porque se tiene que eliminar todo elemento que esté cerca de las vías y que pudiera caer sobre ellas por seguridad. Pero pensamos que en este caso, el depósito de Chiva se debería conservar porque es un elemento singular», explica Llop. La estructura en cuestión, emplazada en uno de los andenes de la estación de Chiva, mide entre 8 y 9 metros de altura y tiene casi 4 metros de diámetro. Se trata de una especie de cisterna elevada con unos engranajes que servía para llenar de agua las antiguas locomotoras de vapor. La modernización ferroviaria provocó que estos depósitos dejaran de ser útiles hace ya años. Según señala Llop, había más estructuras de este tipo en València o Xàtiva, entre otros municipios, y en Chiva incluso había dos. Pero poco a poco, ante su escaso uso y los consiguientes riesgos de seguridad que provocaban, fueron eliminándolas hasta que la que queda en el municipio chivano se ha convertido en un rara avis a nivel nacional.
Ante esta situación, el presidente de AVAF, Juan Marco, y el concejal de Cultura, Manu Clemente, se pusieron en contacto con Adif para tratar de evitar que este antiguo depósito se convierta en chatarra. Según asegura Llop, la empresa estatal ha accedido «de palabra» a no desmantelar la estructura, pero sí que debe ser trasladada fuera del recinto de la estación. «A nosotros nos gustaría que acabara en un museo ferroviario, pero de momento no es posible y se quedará como patrimonio del municipio de Chiva», asevera Llop. Así que, de momento, el antiguo depósito de agua de la estación de Chiva seguirá en pie, aunque con un nuevo hogar todavía por determinar.
