Las comarcas de la Serranía y del Rincón de Ademuz gozan de una especial configuración geográfica. En el caso de la demarcación serrana, se encuentra atravesada por el río Turia en un territorio especialmente montañoso con cierta elevación respecto al nivel del mar. Esto ha configurado las formas de vida, las comunicaciones y los asentamientos humanos de la región. De hecho, allí se localiza hábitat humano desde el Paleolítico hasta hoy en día.
Mientras, la «insularidad» del Rincón de Ademuz -sin contacto físico con el resto de la Comunitat Valenciana entre Teruel y Cuenca- le otorga una singularidad propia en cuanto a recursos culturales y patrimoniales. Ademuz siempre ha sido un territorio valenciano desde la temprana conquista del rey de Aragón Pedro II en 1210 con la toma de los castillos de Ademuz y Castielfabib, pero pronto se perdió para la corona, hasta que Jaume I lo reincorporó en el Reino de València. No obstante, su topónimo procede del árabe «Al-Damus».
La Serranía dispone de varios BIC en su comarca. En Alpuente se conservan las murallas y su castillo. Antiguamente rodeaban por completo la población, pero hoy se conservan restos de muros y torres. El mismo municipio alberga las ruinas del Castillo del Poyo en la aldea del Collado, el acueducto de Los Arcos y diversos escudos de la localidad, así como diversos yacimientos icnológicos y paleontológicos.
En Andilla se conservan los restos de murallas y el castillo, además de la iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora, de origen gótico y con renovaciones de estilo renacentista y barroco. En Aras de los Olmos, está reconocida como BIC la Torre del Cortijo, y en La Yesa diversos escudos.
Chelva presenta su castillo, las murallas, la Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora de los Ángeles, la Torrecilla y en general la Villa y sus huertas, que además tienen la categoría de Conjunto Histórico.
A todo ello hay que sumar los castillos de Chulilla, Domeño, Losa del Obispo, Titaguas, Gestalgar o Tuéjar, que también conserva su recinto murado y la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles.
Es de especial interés el conjunto de obra hidráulica de época romana conocido como acueducto de Peña Cortada, que atraviesa los términos de Tuéjar, Chelva, Calles y Domeño.
Asimismo, Villar del Arzobispo también dispone del poblado ibérico de la Seña, con un sistema amurallado. También hay presencia de pinturas rupestres en abrigos de Barajuelo y barranco de Arquela, ambos en Alpuente; Barranco de Tuesa, en Calles; la Quebrada, en Chelva; la Falfiguera, en Chulilla; Barranco las Clochas, en Gestalgar; Rincón del Tío Escribano, en Titaguas; y Corrales de Silla, en Tuéjar.
El potencial de los yacimientos arqueológicos ha permitido hallar una importante zona paleontológica con restos de dinosaurios y huellas que se muestran en algunos lugares museizados y adaptados para la visita. Los principales yacimientos de este tipo se encuentran en La Yesa, Chelva, Alpuente (Aldeas de Corcolilla, Vizcotas, Cañada Paris y Arquela) y Aras de los Olmos (Losilla).
Respecto a la oferta museística, la Serranía dispone del Museo Municipal Paleontológico de Santa Bárbara en Alpuente; el Ecomuseo de Aras de los Olmos; el Museo Arqueológico de Chelva; la Colección Museográfica Permanente Casa de los Cinteros de Villar del Arzobispo; la Almazara del Conde en Sot de Chera; y la Casa Museo Pedralba 2000.
Un total de 6 BIC en el Rincón
Por su parte, el Rincón de Ademuz tiene reconocidos 6 BIC en su territorio. En el municipio de Ademuz se encuentra su Castillo, hoy en ruinas, que contiene restos de época islámica. También en esta localidad está el yacimiento ibérico de la Celadilla, un hábitat ibérico destruido a mediados del siglo IV a.C. En él se han localizado restos de esqueletos de dos individuos, que son de los pocos restos humanos que se conservan de esta época, ya que los iberos incineraban a sus muertos.
En Castielfabib se encuentra la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles que, con elementos góticos, renacentistas, barrocos y neoclásicos, domina la población desde un cerro. Asimismo, en Castielfabib también se hallan los restos de su sistema defensivo.
Mientras, en Torrebaja está la Casa Señorial de los Ruiz de Castelblanque (s. XVI-XVIII) y la torre de construcción defensiva en Torre Alta.
Además de la mencionada Celadilla, en la Puebla de San Miguel hay otros yacimientos como el Alfar del Calvario, la Torre, el poblado en altura del Cabezo de los Moros o el poblado fortificado de Castillejo de Hornos.
También la paleontología tiene una importante presencia en el Rincón de Ademuz, puesto que allí se identificó una nueva especie de mamífero carnívoro del Mioceno de la Era Terciaria en el yacimiento de Ademuz-Vallanca.
En cuanto a museos hay diversas propuestas: el Parque Escultórico Arte y Naturaleza repartido por toda la comarca; el Museo del Pan y Horno Tradicional de Mas del Olmo; el Museo Etnológico de la Puebla de San Miguel; el Molino de la Villa Centro de Interpretación del Agua en Ademuz, o el Cubo de José Maroto en la misma capital comarcal.
