El parque de viviendas de la Serranía experimentó entre 2001 y 2011 un incremento del 15,04 % mientras que el crecimiento del del Rincón de Ademuz se situó en un 4,1 % en el mismo período. Ambas cifras se encuentran muy por debajo de la media provincial, del 19,29 %. Ese escaso crecimiento, además, se focaliza en viviendas secundarias o vacías en lugar de en las principales, como resultado del proceso de despoblación rural que afecta al interior valenciano.

En números totales la Serranía tenía en 2011 registradas 18.505 viviendas, lo que suponía el 1,3 % provincial. Por su parte, en el Rincón había censadas 3.625 viviendas, tan solo el 0,1 % de la provincia.

En la Serranía, el municipio con mayor número de viviendas es Villar del Arzobispo (2.645), seguido por Pedralba (2.420) y Chelva (2.175). En cuanto al incremento registrado en la década estudiada, el mayor crecimiento porcentual se observó en Domeño y Pedralba, ambas por encima del 40 %. En 10 de los 19 municipios de la comarca el crecimiento en el número de viviendas secundarias superó al de las principales. Los casos más destacados en este sentido son los de Chelva, donde el número de viviendas secundarias creció en 524 mientras las principales se redujeron en 139, y el de Andilla, que cuenta con 270 viviendas secundarias más en 2011 que en 2001 y 30 principales menos.

Por su parte, en el Rincón el municipio con más vivienda es Ademuz, con 1.405 hogares que suponen un 39 % del total de la comarca. Aunque el parque de vivienda de la demarcación creció un 4,1 %, el número de casas descendió hasta en cuatro de sus siete localidades (Casas Bajas, Castielfabib, Puebla de San Miguel y Torrebaja). Además, el crecimiento ha sido generado por el número de viviendas vacías, mientras que las principales y secundarias se redujeron.

Respecto al índice de techo de capacidad de acogida residencial, la mayor tasa en ambas comarcas la mantienen Calles, Domeño, Pedralba, Losa del Obispo, Aras de los Olmos, Casas Bajas y Torrebaja.