Un nuevo escándalo de corrupción amenaza con volver a sentar en el banquillo de los acusados al exalcalde de Chiva y exdiputado provincial del PP, José Manuel Haro, tras detectar una investigación judicial el presunto desvío de hasta 292.000 euros de dinero público del consistorio.

El Ayuntamiento de Chiva ha presentado un escrito al juzgado de primera Instancia e Instrucción 2 de Requena en el que solicita la apertura de juicio oral contra el exalcalde; el exconcejal de Urbanismo de este municipio, Marcos Navarro Gil; y Pascual Navarro Giner, ex presidente de la empresa pública Suma Chiva SA a la que fue a parar el dinero.

Según consta en las actuaciones, a las que ha tenido acceso Levante-EMV, el ayuntamiento solicita una pena de seis años de prisión, 24 meses de multa e inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de diez años para Haro y Marcos Navarro. Mientras, para el que fuera presidente de Suma Chiva SA, también plantea seis años de prisión pero multa de 12 meses. Según matizaron fuentes próximas al caso, el ministerio público aún no ha presentado su escrito de acusación.

Estas diligencias parten de una querella que presentó en 2016 la sección de delitos económicos de la Fiscalía de València después de que el concejal del grupo municipal de EUPV, Manuel Clemente, accediera Gobierno local y comprobara irregularidades en la contabilidad de la empresa pública.

Al parecer, no existía motivo alguno para la creación de Suma Chiva SA, ni tampoco informes de los técnicos municipales que avalaran su puesta en marcha. Pero Haro y el resto de procesados la constituyeron en 2008, con un capital social de 69.000 euros, y la nutrieron de capital público. Con ese dinero se habrían abonado facturas por valor de 292.000 euros por trabajos presuntamente ficticios, pues no se han podido verificar.

En su escrito de acusación, el consistorio señala que el exalcalde creó la empresa pública «con el único fin de que dicha entidad mercantil municipal facturase por trabajos ficticios a costa de las arcas públicas del Ayuntamiento de Chiva» y detalla contablemente el dinero que ha desaparecido.

La investigación judicial ha constatado que es Navarro Giner quien «elabora todas las facturas de Suma Chiva SA, y las presenta al Ayuntamiento para que sean abonadas, a sabiendas que no correspondían a ningún trabajo realizado». Mientras, Haro y Marcos Navarro «son los responsables directos de que se abonen».

No es la primera vez que Haro tiene problemas con la justicia, pero siempre ha salido indemne. No obstante, en la fase de investigación no ha logrado acreditar a qué se destinó el dinero. Recientemente la Fiscalía ha presentado otra denuncia contra el exalcalde por otro caso de corrupción.