La fiebre por los selfis está sobrepasando todos los límites. Para algunos, autofotografiarse ya no se limita a sacarse una foto de uno mismo, sino que buscan captar la mejor imagen en los sitios más peligrosos posibles. Eso debió pensar un turista británico el domingo en Benidorm. En lugar de tomarse la típica instantánea en la playa de Levante, optó por subir trepando al piso once de un edificio de la avenida Alfonso Puchades en búsqueda de «likes» en sus redes sociales.

Más en concreto, se dirige a su público de Instagram bajo el apodo «Nuisance». Se califica a sí mismo como un «idiota profesional» y su acto alertó a los vecinos de la zona que no dudaron en avisar a la Policía ante la grave imprudencia del joven. «Está loco, no puedo mirar, llama a la Policía», comentaba una de las vecinas en un vídeo que se ha hecho viral y corre como la pólvora por otra red social, Whatsapp.

Durante la misma escalada, el joven se detuvo para tomar aire y aprovechó para grabarse otro video desde las alturas. Tras él, comenzó el descenso bajo la atenta mirada de todos los vecinos que le esperaban bajo y en los edificios de alrededor.

A pesar del revuelo causado en Benidorm, el turista británico, que presume en redes sociales de selfis peligrosos en diferentes monumentos y rascacielos del mundo (horas antes subió otro vídeo desde la azotea de otro edificio benidormense), no dudó en subir a stories de Instagram el momento e incluso cómo huía de la Policía en un taxi. «Mierda, ha llegado la Policía, hay mucha gente», comentaba el instagramer.