Con el confinamiento obligado por la crisis del coronavirus, son muchos los que prácticamente solo salen de casa para comprar y para pasear el perro, pero también relajan el comportamiento para que los animales no hagan sus necesidades donde no deben.

Así, en los últimos días han aparecido en las fachadas de algunas viviendas del centro de Gandia carteles para «alejar» a los perros a la hora de orinar. Mensajes que, obviamente, van dirigidos a sus dueños para que cumplan con las normas.

«Mi fachada no es un pipicán. Si lo le gusta que su mascota lo haga en su hogar, por favor, que no lo haga en el de los demás», reza uno de esos carteles. Además de la actitud incívica de quien no recoge los excrementos, una situación que también se ha incrementado en estos días de calles desiertas, cada vez son más los vecinos que critican que la orina de los animales no se limpie.