La cosecha de albaricoque, una de las más características de la Vall d'Albaida, sufre mermas en el 50% de la producción debido a la climatología. En la Costera el porcentaje es mayor (58 %) aunque en términos absolutos es en la primera de las comarcas donde esta fruta de verano tiene un especial predicamento en términos como los de la Pobla del duc, Quatretonda, Castelló de Rugat... La bajada en la producción se debe a las adversas condiciones meteorológicas, según apuntan desde la Unió de Llauradors. El sindicato agrario señala que se han juntado dos circunstancias adversas: «un invierno con temperaturas altas que ha restado horas frío a los cultivos; un mes de marzo muy lluvioso, con exceso de humedad y pocas horas de sol que ha llevado una polinización defectuosa y un mal cuajado de los frutos», detallan.
Las variedades tradicionales de albaricoque en estas comarcas son la galta roja o mitger donde la reducción de producción puede llegar hasta el 70 %, y en las variedades más modernas como los diferentes tipos de mirlo será menor, pero rozará el 40 %.
La Unió ha elaborado un estudio sobre la campaña de albaricoque, melocotón-nectarina y ciruela, cuya conclusión más destacada es que la adversa meteorología ha provocado una merma del 41 % en la Vall d'Albaida y del 55 % en la Costera, con unas pérdidas estimadas de 5,2 millones en la primera y de 2,2 millones en la segunda, que suman cerca de 7,5 millones de euros.
En melocotón-nectarina-paraguayo y pavía el descenso previsto será de un 20 % en las dos comarcas, con unas pérdidas cifradas en 1,2 millones.
