Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado mantienen un férreo marcaje a los okupas que en las últimas semanas se instalaron en hasta cuatro chalés de la urbanización Monte Júcar de Alberic. Los vecinos denunciaron públicamente, a través de Levante-EMV, esta situación. Una semana después, la Guardia Civil se ha presentado junto a técnicos de empresas energéticas para cortar los suministros de agua y luz, a los que se habían enganchado de manera fraudulenta.

En apenas un mes, como adelantó este periódico, hasta cuatro grupos de individuos han ‘okupado’ otros tantos chalés de la urbanización. Según detalló el presidente de la asociación de vecinos, el mismo fin de semana en que el Gobierno decretaba el estado de alarma ante la emergencia sanitaria provocada por la expansión del coronavirus se produjo la ocupación de los dos primeros chalés que se encontraban deshabitados y, al parecer, en manos de entidades bancarias. Hace algo más de una semana, los residentes detectaron la ocupación de otras dos viviendas. Además, hubo un quinto intento, aunque éste resultó frustrado.

Los vecinos alertaron a las autoridades. Tanto la Policía Local como la Guardia Civil se personaron en varias ocasiones para abrir las diligencias judiciales oportunas. También han incoado expedientes sancionadores a algunas de las personas que, supuestamente, han ocupado estas viviendas por incumplir la orden de confinamiento y, al parecer, incluso interpuesto denuncias por no tener en regla los vehículos.

Ahora han dado un paso más para obligar a los okupas a que abandonen los chalés. A través de una operación que contó con un gran despliegue de medios que no pasó desapercibido para las decenas de personas que residen habitualmente en Monte Júcar, las autoridades acudieron a la urbanización acompañadas de especialistas de compañías energéticas. A su llegada, los individuos se conectaron de manera fraudulenta a la red eléctrica para tener suministro de luz. Los especialistas desactivaron las conexiones para dejarles sin recursos para forzar su marcha. Pese a que, tal y como reconoció el alcalde, Toño Carratalá, en su momento, las fuerzas del orden tienen poco margen de maniobra, éstas han demostrado que hacen cuanto queda a su alcance.

Bancos y particulares

La urbanización Monte Júcar es una área residencial ubicada entre Alberic y Gavarda, justo al lado de la autovía A-7, que cuenta con alrededor de 200 viviendas. En ella residen cerca de 250 personas de forma habitual. Alrededor de veinte casas se encuentran deshabitadas, algunas en manos de bancos o inmobiliarias, que son las que suelen sufrir este tipo de allanamientos, si bien las últimas ocupaciones registradas también han afectado a viviendas de particulares.