Han tenido que pasar 10 años, para desesperación de los vecinos afectados y del Ayuntamiento de Sagunt. Sin embargo, al fin ayer empezaron los trabajos de soterramiento de las líneas de alta tensión que cruzan el PAI Fusión. Se trata de una zona urbanizada hace una década entre Sagunt y Port, aún llena de solares vacíos, pero también con residentes indignados por la permanencia de esas torres gigantescas que se prometieron eliminar hace tiempo. Tal era su malestar que no dudaron en movilizarse hace meses, colocando pancartas de protesta y llevando sus demandas al pleno, como ha venido contando Levante-EMV.
6 meses de obras
Tras numerosos trámites, Iberdrola Distribución Eléctrica SAU empezó ayer el alzamiento topográfico y la señalización de la zona donde se va a actuar con un presupuesto que asciende a 745.282 euros, de acuerdo con el proyecto autorizado por la Conselleria de Economia Sostenible.
Las obras cuentan con un plazo de ejecución de seis meses, aunque podría solicitarse una ampliación si fuese necesario, como precisaron desde el ayuntamiento. El alcalde, Darío Moreno, resaltó el comienzo de las obras y lo calificó como una «gran noticia ya que desde que se pusieron los cimientos en la anterior legislatura, los vecinos reclamaban acciones ya». Igualmente, destacó que para el equipo de gobierno «era una prioridad máxima, por eso hemos puesto todo el esfuerzo y trabajo para que este día llegase». Además opinó que esto abre la posibilidad de atraer inversiones al PAI y consolidar la zona.
