Compromís y el PSPV de Tavernes de la Valldigna están a las puertas de formalizar un acuerdo con el que se convertirán en nuevos socios de gobierno en esta localidad, reeditando el Pacte del Botànic que se extiende en municipios de toda la Comunitat Valenciana, además de en el propio Consell de la Generalitat.
Para cerrarlo de forma definitiva y poder firmar el pacto falta por conocer la opinión de los militantes de ambas formaciones, que se pronunciarán esta misma semana en referéndum o asamblea sobre si aceptan o no el acuerdo que los equipos han estado negociando en las últimas semanas y que se encuentra perfilado a falta de concretar flecos. Las ejecutivas han dado el visto bueno.
Según ha podido saber este periódico, los socialistas se incorporarán al ejecutivo con varias delegaciones de peso. En concreto, los dos ediles del PSPV, a falta de conocer el reparto exacto, gestionarán las carteras de Turismo, Deportes y Participación. El acuerdo también incluye una delegación nueva que trabajará por los derechos del colectivo LGTBI con actividades para visibilizarlo durante todo el año pero en especial entorno al 28 de junio.
Así, una vez se formalice el pacto, Anna Bellver dejará de gestionar la cartera de Turismo y se queda con Educación, mientras que Josep Llàcer se descarga trabajo cediendo Deportes y Enric Chofre deja Participación. Respecto a la nueva delegación de diversidad se disgrega de las funciones de Noelia Alberola al frente de Servicios Sociales.
El nuevo gobierno de Tavernes pasará a estar formado por un total de 10 concejales, los ocho de Compromís y los dos del PSPV. El ejecutivo gana una estabilidad de la que carecía hasta el momento y que le permitirá sacar adelante proyectos importantes sin tanta complejidad como lo venía haciendo hasta ahora. Además, se reedita el pacto que estos dos partidos (junto con EUPV) alcanzaron en 2011 y que no acabó bien por un enfrentamiento sobre el muro del río Vaca entre ambas formaciones. El único que sobrevive de aquellos años es el concejal Josep Llàcer.
Un momento clave
Los socialistas entran en el gobierno en un momento clave para la formación, ya que se encuentran en pleno proceso de renovación tras el cambio en la portavocía, que asumió Lara Romero, y la entrada en breve de un nuevo edil que asumirá gestiones de gobierno. Son movimientos, junto con el del cambio de alcalde, que han ayudado a que madurara un acuerdo que ya se intentó de manera infructuosa en verano del 2019. Primero tras las elecciones y después con el nombramiento de Sergi González como alcalde.
Aunque la posibilidad siempre había existido, fue en febrero cuando, de forma discreta, los equipos de ambos partidos se volvieron a sentar alrededor de una mesa. En las semanas siguientes, ya en pleno confinamiento, se aprovechó para acelerar los contactos y se sucedieron las reuniones telemáticas para ir perfilando un acuerdo que está prácticamente cerrado a falta de nuevas reuniones.
