Un sí condicionado. Es lo que ha recibido el gerente del circuito de Guadassuar por parte del ayuntamiento. La Junta de Gobierno Local ha aprobado de manera unánime la concesión de la licencia ambiental solicitada por la empresa Car Track Events para retomar la actividad del bautizado como Circuit de la Ribera. El requisito establecido no es otro que el cumplimiento, de la Declaración de Interés Comunitario y del informe emitido por el Servei d'Infraestructura Verda i Paisatge en el año 2016.
La reapertura del circuito, que lleva más de un año con el cartel de cerrado, se antoja más cerca que nunca. El proceso administrativo ha sido largo y complicado pero ya vislumbra el final. De hecho, el principal obstáculo que ha encontrado en los últimos meses ha sido, obviamente, la pandemia. Según han explicado a Levante-EMV fuentes municipales, la aprobación definitiva del Consell a toda la documentación requerida para poder aprobar la licencia ambiental llegó el 27 de febrero. El consistorio se puso manos a la obra para preparar las notificaciones pertinentes a todas las partes, incluidos los vecinos que iniciaron un litigio contra el proyecto a la espera de posibles alegaciones. Y de golpe llegó la alerta sanitaria y la administración se paralizó, en un nuevo obstáculo para la empresa promotora, que a finales del año pasado ya confiaba en una pronta recuperación de la actividad económica.
«Seguramente, nos podríamos haber evitado todo este embrollo si desde un principio se hubiesen realizado los trámites para la licencia ambiental, como pretendía el ayuntamiento, en vez de mediante una de espectáculos, como finalmente se nos dijo. Después vino la Justicia para aclarar que, efectivamente, la vía era la ambiental. De ese modo, el circuito hubiera abierto las puertas más tarde pero nunca se habría visto en la obligación de cerrar», comentaron al respecto fuentes del equipo de gobierno.
Precisamente, el ejecutivo local al completo votó a favor de otorgar la licencia ambiental a la empresa Car Track Events, en lo que defienden como un claro gesto hacia la mercantil: «Demostramos que no estamos en contra de nadie, solo a favor de que se cumpla la normativa. Como mucho, el circuito nos puede acusar de actuar con demasiada prudencia», aseguró el gobierno municipal.
Proyecto refundido
La mencionada declaración incluye seis condiciones que se deben cumplir. El consistorio ha emplazado a la empresa a presentar, en el plazo de dos meses, un proyecto de construcción refundido que se adapte a dicho documento. Para su cumplimiento, el circuito debe realizar algunas intervenciones, aunque puede apelar al gobierno autonómico a que cambie algunos de los criterios, como ya hizo anteriormente.
