Uno de los participantes en la oposición que ha puesto en marcha el Ayuntamiento de Almoines para otorgar dos plazas en la Policía Local ha presentado un escrito pidiendo la suspensión de casi una quincena de preguntas del examen tipo test al considerar que su formulación contraviene los preceptos establecidos en las bases de la convocatoria.

En concreto, el aspirante asegura que se trata de cuestiones «muy locales», las cuales, dice, no estaban en el temario del que dispusieron para poder prepararse la prueba, según el escrito de impugnación al que ha tenido acceso este periódico. Según explica, la legislación apunta que los temas singulares de cada municipio «no deben superar el 10% del temario, por lo que tampoco las preguntas deben estar por encima de ese porcentaje». En cambio, denuncia que en esta prueba «eran el 40%».

Entre las cuestiones a las que se refiere debía contestar en qué calle se encuentra el local del antiguo Teatre Cinema o la sede de la asociación cultural L'Almoina. También había temas de la historia de la localidad como el nombre popular que recibe la locomotora que está expuesta en el municipio, el horario del parque del Trenet, el año en que se derribaron las murallas o el número de «pipican» que hay en Almoines. Se trata de temas difíciles de conocer para alguien que vive en otro municipio, en su caso, uno de la Ribera Alta.

Prepararse en historia

Según el opositor, todas estas cuestiones aparecieron en el ejercicio «sin estar en el temario». Asegura que el pasado marzo se interesó por dónde podía encontrar historia del municipio para prepararse el examen y le remitieron a la página web, donde no aparece toda esa información y de la historia hay apenas unos pocos párrafos.

Por otra parte, las alegaciones apuntan a que hay un número alto de preguntas que son más administrativas que del trabajo policial, como la que pide responder sobre la cuantía de la multa por incumplir la ordenanza de recogida de enseres en la vía pública o conocer a quién le corresponde instruir una sanción en caso de infracción de la normativa de convivencia cívica.

Las preguntas del ejercicio las propone el tribunal examinador, formado por entre cinco y siete personas y nombrado una parte por el ayuntamiento y otra por la Agencia Valenciana de Seguridad. Estos son quienes elijen las preguntas de la prueba tipo test.

Fuentes del tribunal explicaron ayer a Levante-EMV que en los próximos días el aspirante recibirá respuesta a la impugnación pero avanzan que todas las preguntas que aparecieron en la prueba se ciñen a la legalidad, por lo que no quedarán anuladas y el procedimiento seguirá adelante con la siguiente prueba, que es el supuesto práctico.