Sigue abierta la causa de homicidio por la muerte de José Joaquín O. M, el vecino de Llíber de 44 años que recibió tres disparos y murió, al ingresar por segunda vez en el hospital de Dénia, de la peritonitis que le causó el tiro en el abdomen (los otros dos los tenía en las piernas). Pero ahora a esa investigación se añade otra, la de una presunta negligencia de los médicos del hospital de Marina Salud de Dénia que, en el primer ingreso, no le detectaron al tiroteado el balazo en el abdomen. Dos médicos declararán hoy ante la misma jueza que instruye la causa de homicidio.

Esta magistrada decretó el pasado 27 de noviembre el ingreso en prisión provisional de Juan Francisco R. S., de 48 años y vecino de Benissa, el sospechoso de haber disparado a José Joaquín. El acusado afirmó que el vecino de Llíber había acudido a su vivienda, situada en una partida rural de Benissa y donde se hallaba también Nadine K., de 35 años y expareja del ahora fallecido. Reconoció que se pelearon. Pero negó que él fuera el autor de los disparos. Mientras, la mujer, que quedó en libertad provisional, dijo que ella se escondió y que le tenía mucho miedo a José Joaquín.

Horas después una ambulancia acudió a la casa en Llíber de este último. Lo llevó al hospital. Allí balbuceó que él mismo se había disparado con una escopeta en las piernas. Afirmó que le dolía mucho el estómago. Pero no mostró el balazo en el abdomen. Los médicos no se lo detectaron y, tras hacer noche en el hospital, le dieron el alta. Al día siguiente, una familiar llevó a José Joaquín de nuevo al centro sanitario. El tiro en el abdomen le había causado una peritonitis. Falleció en el hospital.