Tal como contábamos ayer, una jaqueca impidió a la consellera Alicia de Miguel asistir al pleno del Consell que se celebró el viernes en Alicante. Sin embargo, la titular de Bienestar Social fue vista el viernes por la mañana, hacia las 12.30 horas, caminando por la calle Don Juan de Austria de Valencia cargada con bolsas de compra, sola, con pantalón y chaqueta, gafas de sol, hablando por el móvil y con aspecto de cansada.

Frente a quien pudiera pensar que la consellera hizo novillos voluntariamente cabría explicar que De Miguel acudió el viernes, hacia las 9 de la mañana, al Hospital General de Valencia en una visita relacionada con una migraña que padecía. Seguramente, no se encontraba con ánimo de viajar a Alicante y se quedó en la capital.

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería valenciana, Juan Carlos Gelabert, se dejó caer por el barrio del Carmen el pasado viernes por la noche para encargarse personalmente de colgar carteles con motivo de la campaña que los hosteleros están llevando a cabo para mejorar el ocio en la ciudad. Junto a Gelabert también estuvo el responsable de comunicación de la federación, Vicente Pizcueta. Los carteles dicen: «Per un oci de calitat. Solucions ja».

El actor alicantino Fele Martínez ha confesado recientemente en una entrevista que se siente «muy bien» con su papel de cabaretera en la obra Flor de Otoño que está interpretando en Barcelona durante estos días. Martínez ha llegado afirmar sobre su papel, en el que también hace de abogado, que los tacones le sientan «bien» y que le hacen las piernas «más largas». A la pregunta de si se ve «guapa», el actor asegura: «Sí, la verdad es que sí. Tengo a los amigos encendidos, ja, ja, ja», aunque aclara, «ser bella cuesta».

A diferencia del resto, TVE fue la única cadena de televisión que en sus conexiones con Valencia se refirió al Palau de les Arts sin respetar su denominación oficial. La cadena pública fue la única que utilizó Palacio de las Artes y no el nombre que figura en todos los folletos informativos sobre el edificio.

El alcalde de Massamagrell, Miguel Bailach, está que no cabe de satisfacción tras el nacimiento de su primer retoño. El pequeño Miguel pesó 3.100 gramos y se encuentra en perfecto estado, al igual que su madre Hermi.

Bailach se tendrá que esperar al menos 18 años para contar con un nuevo militante y un voto más para mantener la alcaldía.