Efe, Madrid

Medio Ambiente agilizará la puesta en marcha de centros de intercambio de derechos de usos de agua para amparar el intercambio de este recurso entre cuencas hidrográficas y tratar de paliar los efectos de la sequía. La ministra Cristina Narbona aseguró que estos centros son el «embrión» de los bancos públicos de agua, y observó que hay muchos regantes «que no necesitan toda el agua que están usando» y concesiones que no están ajustadas a las necesidades.

Narbona consideró además que los bancos públicos supondrán «un estímulo» para el intercambio de aguas y contribuirán «a eliminar algunos de los mercados negros que existen».

Narbona observó que ya se ha dado cobertura legal al primer intercambio entre cuencas del Guadalquivir y la del Sur, y adelantó que la intención es regular legalmente otros intercambios. Entre éstos, apuntó la posibilidad de autorizar un intercambio de recursos entre los regantes del Tajo y los del Segura, y explicó que se trata en todos los casos de lugares donde ya existen interconexiones, por tratarse de regantes que están sobre un mismo acuífero o que están ya conectados por conducciones.

El Consejo de Ministros autorizó ya la creación en tres Confederaciones Hidrográficas -las del Júcar, el Segura y el Guadiana- de Centros de Intercambio de Derechos de Uso del Agua. A través de esos centros podrán hacer ofertas de adquisición de derechos de uso entre los distintos concesionarios de sus recursos hídricos y, tras adquirir una determinada cantidad de agua, utilizarla para recargar acuíferos, para embalsarla en los pantanos de regulación, u ofrecerla en una oferta pública de venta.