El traslado de la presa de Vilamarxant quepropone la Generalitat haría ineficaz la obra

J. Sierra, Valencia

La presa para defender la ciudad de Valencia de una posible inundación catastrófica sólo tiene un emplazamiento posible en Vilamarxant en un tramo del río incluido en el parque natural del Túria por la Generalitat Valenciana.

Fuentes de Acuamed, la empresa encargada por el Ministerio de Medio Ambiente de estudiar la viabilidad de la presa, se mostraron sorprendidos por la petición del conseller de Territorio y Vivienda, Esteban González Pons, que pidió «imaginación» para buscas una alternativa al futuro embalse, cuya construcción está pendiente desde la década de los cincuenta cuando se asoció a la del Plan Sur de Valencia.

Según las fuente consultadas por Levante-EMV, la última cerrada- emplazamiento susceptible de encajar una presa- es la situada en el paraje de El Pabrel, entre los términos de Vilamarxant y Benaguasil. Aguas abajo, el Túria entra en la plana de inundación del Pla de Quart donde no existe espacio adecuado para una presa para laminar avenidas, aunque si para un pequeño azud- La Cañada- que regularía aguas de riego, proyectado hace años, pero cuya construcción afectaría el corazón del nuevo espacio natural.

La posibilidad de construir la presa aguas arriba del lugar elegido es «impensable» ya que «no serviría de nada», según las fuentes.

Los expertos en hidrología sostienen que en las inundaciones catastróficas del Túria juega un papel «determinante», incluso superior al del propio río principal, las aportaciones de las ramblas Castellana y Primera de Lliria, que desembocan en el cauce del Túria unos metros aguas arriba del emplazamiento elegido.

Los caudales aportados por estos dos cauces en una avenida extraordinaria son capaces, junto a los del barranco del Mandor, aguas abajo y en las proximidades de l$27Eliana, de provocar inundaciones severas en el llano de inundación de Valencia.

El riesgo principal, señalan los expertos que consideran necesaria la construcción de la presa de Vilamarxant, es que la capacidad del nuevo cauce del Túria en Valencia sea insuficiente para encajar una riada violenta del Túria e incluso que el río funda el estrecho margen que separa el nuevo del viejo cauce del Túria- se trata de terrenos de relleno y aluvión amontonados artificialmente y de apenas un centenar de metros-, provocando daños multimillonarios en las infraestructuras que jalonan el antiguo encauzamiento.

Sin embargo, la «imaginación» que pide González Pons podría encontrar una aliado en el estudio que realiza Acuamed y que estará listo en octubre. El trabajo, elaborado por prestigiosas consultoras, trata de delimitar si existe un riesgo real de que el nuevo cauce sea insuficiente o si con pequeñas obras puede evitarse construir la presa.

En este sentido, fuentes de Acuamed dijeron que la presa solo se hará «si hace falta» -el proyecto constructivo está pendiente del citado informe- aunque recordaron que de hacerse incluirá una «lamina de agua» permanente para uso social y como reservorio medioambiental en el entorno de la presa.