L. B. B., Valencia

Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) sustituirá el cable de cobre por aluminio para evitar que los robos de este material afecten a la circulación y la seguridad, según informaron ayer fuentes oficiales de la empresa.

Como ayer adelantó Levante-EMV, el robo de 40 metros de material de cobre en un punto cercano a Paiporta provocó durante siete horas retrasos a un centenar de trenes y obligó a suprimir parte de algunos trayectos. Además, el bloqueo automático de trenes tuvo que anularse entre Paiporta y Picanya entre las 5.30 y las 10 y las 12 de la mañana. Durante estas horas el control del tráfico de trenes se hizo a la vieja usanza, con bloqueo telefónico en el que se autoriza el paso de trenes mediante llamadas telefónicas entre estaciones y a partir de la confirmación visual del paso de convoyes. La circulación volvió a la normalidad alrededor del mediodía.

La decisión de sustituir el cobre por el aluminio se justifica por el menor coste del aluminio y el escaso interés crematístico que tiene para los posibles ladrones. Sólo hay una pequeña pega, según FGV. El cobre es mucho más conductor de la electricidad que el aluminio, por lo que se deberá utilizar más cantidad del segundo material para confeccionar los cables del sistema de comunicaciones (95 milímetros cuadrados en el caso del cobre mientras que en el aluminio son necesarios 105). El plan de sustitución está "ultimándose", aunque físicamente no se ha iniciado. Simplemente habrá que sustituir las conexiones entre los semáforos y enclavamientos y los armarios eléctricos (que FGV calcula serán unos 6 kilómetros). La actuación precisará una inversión, según cálculos de la empresa, de unos 70.000 euros.