J. V. P., Valencia

"Hay mucha gente joven que le gusta la casca", explica Rosa de Dulces Mateu, una pastelería de Sueca. "Me la pide mucha gente", apunta. Y es que en este establecimiento la venta de la casca, el dulce tradicional valenciano en las fiestas de Reyes supera ampliamente al roscón.

De hecho, según explica Rosa, tan sólo hace cuatro o cinco años que optaron por vender el roscón, de origen francés e introducido en la Comunitat Valenciana por Felipe V."Teníamos miedo por si se perdía la tradición de la casca", asegura Rosa.

Aunque los temores no se cumplieron y el producto tradicional sigue imponiéndose claramente en el gusto de la clientela.

Es lo más vendido

"Hace cuatro o cinco años que empezamos a hacer roscón de reyes, porque la gente lo empezaba a pedir, pero ni comparación con la casca"."¡Hago docientos roscones y cascas una barbaridad!", indica su marido Rafael, quien destaca que en estas fechas "la casca es de lo más vendido".

"Hacemos muchísimas. De las más pequeñas he hecho cien docenas, de las de una libra 14 docenas y de media libra 22 docenas", explica.

"Es una tradición arraigada, mi abuelo ya las hacía. Aquí siempre ha habido tradición de regalarlo a los niños en estas fiestas pero se ha mantenido también para los mayores", asegura Rafael que ahora cuenta con 53 años. En su establecimiento todavía se pesan y venden las cascas en libras, como lo hacía su abuelo antiguamente. Los confiteros valencianos quieren promover el impulso de este dulce autóctono, que también defiende Rafael.

"Me siento muy defraudado porque muchos gobernantes hablan de las tradiciones y se olvidan de esto"."La casca no lo hace nadie más, sólo los valencianos".

Vecinos de otras localidades y de Valencia capital acuden exclusivamente hasta el horno de Rafael en busca de su casca.

Así,Rosa resalta que"viene gente a propósito desde Valencia, Riola, de Cullera o Alzira".

En la ciudad de Valencia entre algunos de los diferentes establecimientos que trabajan la casca se encuentra por ejemplo La Rosa de Jericó, en la calle Hernán Cortés, a la altura del número 14. También en el número 17 de la calle Albacete la pastelería La Lyonesa vende cascas, así como Dulces San Miguel en Torrent, en la Avenida del País Valencià, número 49.

También fuera de Valencia entre otras vende casca la Pastelería Galán, en Albal.