Es un niño esbelto, muy guapo, que habla con increíble desparpajo sentado sobre un saliente del río , en una de "les lloses" que permiten el baño infantil, entre el molí Guerola y el molí de la Grillén, donde el Clariano forma el gran codo de la Baronía antes de adentrarse por la Clariana hasta la Aielo de Malferit. Aielo significa "lamento del malherido". Este niño es una esponja, sabe las historias del Ciscar, de la Melonera y de los Penadés, cuyos melones de oro son citados por el mismísimo Winston Churchill en las celebres Memorias que le valieron el Premio Nobel de Literatura. Habla de la Baronía y sus mujeres, Consuelo, Isabel y María, la mayor, que es su madre. El primo, tres años mas joven, le escucha hechizado por dos hechos que le hacen invenciblemente superior: "sap tocar la guitarra i va al Convent". Estamos 1953-54.

Verano. Bolonia. 1988; patio del Colegio de los Españoles, es el 900 Aniversario de la creación de la primera universidad, y la Universidad de Bolonia va a honrar a Rey de España con las insignias de Doctor Honoris Causa. Vicente Montés, el niño promesa, es ya un "bolonio" insigne, catedrático y un refrerente europeo en materia de Derecho Civil, el duque de Soria le escucha. Amparo Reig, la esposa de Vicente, ya en la cena, explica la larga travesía en España de la universidad bajo el franquismo "avevamo paura".

Otoño. Reunión de la Revista Crónica en el entorno del año 2000. Ha cambiado la égira política en el panorama de la autonomía. La revista que había valorado muy críticamente los primeros cien días del primer presidente popular -"Encefazaplana plano", rezaba el titulo-, no tiene ahora tan claro que se pueda sobrevivir en términos numantinos fieles sólo al uso del valenciano y a una insobornable causticidad crítica. En el ámbito local una frase con ingenio deja un escozor de una década. Vicente había escrito en un anterior episodio "Caixa Ontinyent ha publicado un libro con ocasión de su primer centenario, menester sea que no tengan que pasar otros cien para que publique el siguienteÉ". Pide una visión de largo alcance, "paese" territorio y nación han de ser un continuo. Y así lo demuestra en su trayectoria universitaria y en el CVC y en el Supremo.

Invierno. "Asmorzar" en Heretat de Taverners: con su enólogo, sus trabajadores de la bodega y un coche de amigos que hemos subido desde Ontinyent forma una tertulia mañanera de invierno que es una delicia. Sobrepasa su causticidad y está más filósofo y como siempre filólogo "el pla de mallaura", dice, lo lleva en el nombre "mal-llaura", a casi 600 metros y a esta distancia del mar esta micro-vinya es un portento. "A ver si con tanto Derecho en el cuerpo acabas pasando a la historia como creador de buenos vinos" le dice alguien mientras nos despedimos, y el como susurrándole a un horizonte común -que a todos nos espera- me dice al oído: "Anant al marÉ els homes s'agermanen / Tornant del marÉ mai més seran esclau".