La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, aseguró ayer que los populares catalanes «nunca» han contratado ni trabajado con ninguna empresa vinculada a la trama Gürtel, sobre la que ha opinado que el ex secretario general del PP valenciano Ricardo Costa tuvo comportamientos «impropios» y «debía ser cesado». Pese a recordar que Costa no está imputado, señaló que el PP «ha tomado las medidas que debía tomar» en relación al ex portavoz popular en las Corts. Calificó la trama Gürtel de «muy triste»: «Cuando alguien en política viene a enriquecerse es lo peor que puede hacerse, es vergonzoso y me produce cierta repugnancia personal y profesional».

Carmen Martínez

La secretaria general de los socialistas de la provincia de Valencia, Carmen Martínez, dijo que la reunión de los barones provinciales sin Camps refleja que «la cosa está muy mal, pero que muy mal» en el PP, y añadió: «Estamos listos si la regeneración del PPCV pasa por gente con el expediente de Fabra, Rus o Ripoll». «Fabra es un coleccionista de imputaciones al que Anticorrupción ya le pide cárcel; Rus es el abanderado de los insultos al mundo de la educación; y Ripoll tiene roto en dos a su partido en Alicante», aseveró. Lamentó que dirigentes con responsabilidades de Gobierno, en este caso las diputaciones, «se dedique a conspirar y plantear batallas internas intentando sacar tajada de la crisis, ahora que ´los mundos de Camps´ se desmoronan, en vez de centrarse en la situación de los valencianos, a los que tiene abandonados».