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Se elegía a su sustituto después de permanecer diez años en el cargo, pero no se dejó ver, ni en el hemiciclo, ni entre el público que llenaba el salón de sesiones del Ayuntamiento de Alberic. La ausencia de Enrique Carpi en el pleno extraordinario celebrado ayer le impidió por una parte apoyar la elección de su sucesor, Faustino Sala, -podía haber participado en la votación ya que su renuncia al escaño era el último punto del orden del día- y, por otra, defenderse de las acusaciones lanzadas contra él por el portavoz de IXA-EU, Miquel Pallarés, ya que ninguno de los ediles del PP lo hizo.
Sólo al finalizar el pleno Sala comentó que algunas de las afirmaciones realizadas por Pallarés "habría que matizarlas mucho". El nuevo alcalde sí confirmó, como había adelantado Levante-EMV, que no mantendrá en el cargo al asesor de seguridad que tenía Carpi, que tantos recelos generaba incluso entre los propios integrantes del gobierno municipal.
El pleno de elección del nuevo alcalde transcurrió con absoluta normalidad y apenas duró media hora. Fueron las tres intervenciones del portavoz de IXA las que ocuparon la mayor parte del tiempo. El discurso de Sala en el que pidió la colaboración de todos los grupos "por el bien de Alberic" apenas duró 50 segundos.
