La última cita "creíble" y confirmada de la presencia del lince ibérico en la Comunitat Valenciana se remonta a finales de los años cincuenta, cuando un ejemplar de Lynx pardinus fue abatido en Els Ports de Tortosa-Beceite, en el límite con Cataluña y Teruel.

Sin embargo, la presencia del felino, paradigma de la biodiversidad en la península, no ha dejado de ser un rumor recurrente que en los últimos años se ha hecho más frecuente a consecuencia de las cada vez más abundantes plagas de conejos, una presa cuya abundancia o escasez se liga al destino de la especie española por antonomasia.

Juan Jiménez es el Jefe del Servicio de Biodiversidad de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda y uno de los mayores expertos españoles en otro animal cuya supervivencia estuvo amenazada hasta hace poco: la nutria. "Desde los setenta, que empecé a investigar, he llegado a estar obsesionado por este tema y he respondido a cualquier llamada en la que alguien aseguraba haber visto al lince", confesó.

"En los años noventa me aburrí siguiendo la pista de animales que luego resultaban ser gatos domésticos, ginetas, etc.", confiesa Jiménez, que describe períodos de relativa calma con otros en los que el rumor vuelve con fuerza. "La última cita constatada y recogida en varias monografías es la Els Ports", explica el experto en mamíferos. Hace unos pocos años, coincidiendo con la polémica desatada sobre la presencia del lince en las sierras próximas a Madrid, un guarda forestal de amplia experiencia y destinado en una zona despoblada de la Comunitat Valenciana dio la voz de alerta. "Fuimos y recogimos unas muestras de excrementos que finalmente aceptaron analizar con la técnica del ADN en Doñana, aunque después de exigir garantías sobre la seriedad de la posible cita y la de la propia muestra", explica. "El resultado fue negativo", matiza Jiménez.

Mientras, la conselleria sigue atendiendo cualquier llamada o aviso en los que se habla del lince en la Comunitat Valenciana y no descarta que cualquier día el fantasma del felino se materialice de nuevo.

El fantasma del felino habita en las Hoces,

la Muela y Ayora

El Jefe del Servicio de Biodiversidad de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, Juan Jiménez, cree que no hay linces en la Comunitat Valenciana. Y lo argumenta: "Al cabo del año los centros de recuperación de fauna reciben miles de llamadas y realizan centenares de salidas sin que nunca hayan intervenido en nada parecido a un lince; además tampoco ha habido nunca atropellos, tan comunes en las zonas donde hay lince...". Cree también que en contra de la creencia popular el lince es un animal "fácil de ver" e incluso de fotografiar en lugares que ha vuelto a colonizar como algunas sierras de Jaén y Sierra Morena. Existen sin embargo citas no comprobadas del lince en las sierras próximas a Ayora y el cañón del Júcar; en las Hoces del Cabriel, el Rincón de Ademuz y la Muela de Cortes, donde el rumor sitúa la muerte de un lince en los años ochenta, certificado por un agente forestal, al que ocultos poderes habrían obligado a callar. "He revisado toda la documentación, incluso la del antiguo Icona, y no hay nada que encaje con ese rumor", asegura.