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Tres nuevos testigos declararon ayer en el juicio en ausencia contra el ex almirante argentino Emilio Massera, de 84 años, que se celebra en Roma por su supuesta responsabilidad en la desaparición de tres ciudadanos italianos durante la dictadura militar (1976-1983).

Uno de los testimonios clave que se escucharon ayer fue el de la psicóloga valenciana Susana Burgos Molina, nacida en Argentina pero afincada en Valencia desde hace 30 años. Es una de las poco más de 100 personas que lograron sobrevivir de las 5.000 que pasaron por el centro de detención y tortura de Buenos Aires, la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), que dirigió Massera.

Burgos estuvo detenida en el ESMA durante dos años y explicó cómo se vivía en el centro de detención y cómo eran los vuelos de la muerte que llevaba a cabo la Armada en los que lanzaban "elementos subversivos" vivos al mar desde aviones para descongestionar la cárcel. Aportó además que vio físicamente a Massera en dos ocasiones en la ESMA. El ex militar integró junto a Jorge Rafael Videla y Héctor Agosti la primera Junta Militar que gobernó Argentina.