El presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, se ha reafirmado hoy ante la jueza en los insultos que profirió contra tres profesores de valenciano durante un acto público celebrado el 25 de abril de 2009, a los que llamó "gilipollas" por decir "aleshores" y "gairebé", y afirmó que iba a ir "a por ellos" y a "rematarlos".

Rus ha comparecido esta mañana en el juicio verbal de faltas ante la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Xàtiva, al no prosperar el recurso que presentó ante la Audiencia Provincial pidiendo que se desestimara la demanda interpuesta por Escola Valenciana y el sindicato de enseñanza STEPV.

El también alcalde de Xàtiva y presidente provincial del PP ha insistido en su declaración ante la jueza que sus palabras iban dirigidas a tres profesores universitarios que unos días antes se habían manifestado ante las puertas del Palau de la Generalitat y la Diputación de Valencia, y no contra el colectivo general de docentes, como argumentan Escola Valenciana y el STEPV en su demanda.

El abogado del dirigente popular ha mantenido además que su defendido realizó las manifestaciones "en un acto político, dirigido a militantes del PP", en periodo preelectoral, y que "por su carácter político no debía resolverse" en ese tribunal.

Los letrados de la acusación han reclamado que Rus sea condenado por una "falta de injurias" al pago de 100 euros diarios durante veinte días, y piden la misma condena por una falta de amenazas, en total 4.000 euros.

Los miembros de Escola Valenciana, trece profesores procedentes de todas las comarcas valencianas, han comparecido en el juicio como acusación particular, y han coincidido en considerarse "ofendidos" por las declaraciones del presidente de la Diputación, que atentan, en su opinión, contra la "condición y principios" del colectivo de docentes.

El juicio ha sido seguido por un grupo de docentes y miembros de las dos asociaciones denunciantes, algunos de ellos con camisetas con el lema "Jo dic aleshores i gairebé", aludiendo a los supuestos insultos proferidos por Rus.

Asimismo, una destacada representación del PP en el Ayuntamiento de Xàtiva, alcaldes populares de la comarca de La Costera y La Ribera, y cargos de la Diputación de Valencia, entre otros dirigentes del partido, han seguido también la sesión.

En las puertas del juzgado un grupo de personas esperaba la salida de Rus con pancartas que rezaban lemas como "Sr.Rus, educació" y "Pels drets lingüístics". "Mantengo las afirmaciones", ha declarado el presidente de la Diputación de Valencia a su salida del edificio de justicia ante los medios de comunicación. "No me preocupa la resolución", ha añadido, "puedo esperar ya lo que sea", y ha lamentado que "por decirle a tres señores gilipollas" le "quieran hacer un juicio".

Por su parte, el presidente de Escola Valenciana, Diego Gómez, ha defendido que la denuncia de este colectivo contra las palabras del dirigente popular pretende "defender los valores democráticos" frente a "la prepotencia, autoritarismo y despotismo de los servidores públicos", y "los derechos de miles de profesores que trabajan por normalizar nuestra lengua, por valores democráticos en al escuela".

Gómez ha lamentado que ningún miembro del PP haya "desautorizado" a Rus por sus palabras, y ha señalado que "si la sentencia es condenatoria" Escola Valenciana pedirá la dimisión de Rus y que le sea retirada la militancia del PP.

Marc Candela, miembro del secretariado nacional del STEPV, considera "de justicia" que si a un profesor "se le pueda expedientar" por poner un retrato del conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, cara abajo, "la justicia ha de dar un castigo ejemplar" y el presidente de la Diputación "no puede quedar impune por la repercusión que tiene sobre la dignidad del profesorado y la imagen pública que está dando del profesorado".