El ministro de Fomento, José Blanco, apostó ayer por impulsar la construcción de la travesía central pirenaica (TCP) y el Corredor Mediterráneo para potenciar el transporte de mercancías por ferrocarril. "Habrá que dar prioridad a estos dos ejes sobre otras infraestructuras", aseveró el titular de Fomento en la rueda de prensa posterior a la reunión de ministros de la Unión Europea (UE) celebrada en Zaragoza. "Probablemente ha llegado el momento de construir menos autovías y dar prioridad a los proyectos ferroviarios".

El ministro insistió en el comunicado remitido desde Fomento que aspira a que el corredor mediterráneo forme parte de la "red básica" de las Redes Transeuropeas de Transporte (RTE-T), un conjunto de 30 proyectos que se consideran esenciales para garantizar unas buenas comunicación en Europa.

Blanco reiteró que su prioridad es "impulsar el ferrocarril en su triple vertiente", para el tráfico de pasajeros, de mercancías y las cercanías. "Esta sigue siendo mi prioridad", aseveró, por lo que anunció que "pronto" hará público el mapa de desarrollo del transporte de mercancías en tren, "algo que no estaba hecho" y que pretende solventar "el gran déficit que el país" presenta en esta materia.

El ministro recordó que el tráfico de mercancías por el Pirineo se habrá duplicado en el horizonte de 2025 y que "Zaragoza se ha constituido en un nodo logístico importante". Por ello, uno de los objetivos del Gobierno de España es captar el flujo de mercancías desde África y Asia hacia el resto de Europa, lo que a su vez obliga a impulsar el Corredor Mediterráneo.

Blanco criticó a la oposición que "quiere obstruir y dificultar el desarrollo de una infraestructura" como es el Corredor Mediterráneo, cuyo objetivo es favorecer la competitividad y la eficiencia económica.