Caja Madrid y Bancaja pedirán previsiblemente el próximo lunes una ayuda pública de 4.465 millones para cerrar su alianza, en la que participarán otras cinco cajas menores, y con la que crearán la primera entidad del sector, según informaron a Efe fuentes conocedoras de las negociaciones.

La idea de las dos grandes cajas es reunir en la mañana del próximo lunes a sus respectivos consejos de administración para que aprueben el protocolo del Sistema Institucional de Protección (SIP) con el que las siete cajas compartirán riesgos, solvencia y resultados.

Se espera que también ese mismo día, la Insular de Canarias, Caixa Laietana y las cajas de Ávila, Segovia y La Rioja aprueben las condiciones de la "fusión virtual", para posteriormente remitir la petición formal de las ayudas al Banco de España.

Así, la podrán presentar un día antes de que expire el plazo límite dado por el Banco de España para demandar ayudas y que éstas sean aprobadas por Bruselas antes del 30 de junio.

Posteriormente, habrá un periodo para elaborar un diseño exhaustivo sobre el nuevo grupo financiero, en lo que se conoce como "due dilligence", antes de que la creación del mismo sea aprobado por las asambleas generales de cada caja integrante, lo que podría demorarse hasta septiembre, calculan las mismas fuentes.

En cuanto a los plazos para devolver el dinero que reciban, el nuevo grupo podrá tener hasta 5 años y, aunque se podrían ampliar a 7 siempre que lo autorice el Banco de España, las fuentes consultadas barajan que podría devolverse en 4 años.

La nueva sociedad sumará 340.000 millones de euros en activos, por encima de La Caixa, y será además la segunda entidad financiera por cartera industrial.

Además, con un volumen de negocio de 376.000 millones superará al que tienen en España el Banco Santander y el BBVA, aunque queden por detrás de estas dos entidades por volumen de activos.

CASTILLA Y LEÓN PIDE INTEGRAR SUS CAJAS

La Junta de Castilla y León ha pedido a las cajas de Ávila y de Segovia que intenten unirse con Caja Duero y Caja España, para después intentar integrarse todas ellas en la fusión de Caja Madrid con Bancaja.

Si Caja Ávila y Caja Segovia se integran por sí solas en la fusión de Caja Madrid con Bancaja, quedarán "diluidas", ha advertido hoy el vicepresidente segundo y consejero de Economía de la Junta de Castilla y León, Tomás Villanueva.

"Estamos a tiempo de hacer un buen proyecto de Castilla y León", antes de que el próximo martes día 15 expire el plazo para acogerse al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ha asegurado el vicepresidente en rueda de prensa en Valladolid.

La Junta considera, según Tomás Villanueva, que "no tiene ningún sentido" desde el punto de vista financiero que las cajas de Ávila y de Segovia se integren por si solas en una fusión como la planteada por Caja Madrid y Bancaja.

Las dos cajas "desaparecerán no tardando" si van solas, por lo que "sí que tendría sentido" que se unieran previamente a Caja Duero y Caja España, que ya han cerrado su fusión, ha comentado al respecto.

Villanueva duda de que dos cajas de ámbito provincial, como las de Ávila y de Segovia, puedan tener peso en la entidad resultante de la fusión de Caja Madrid y Bancaja, y máxime en la "crítica situación financiera" en que se encuentran.

"El ahorro de los impositores de Ávila y de Segovia se va a gestionar en Valencia o en Madrid", ha indicado.

Además, el único futuro de la Federación de Cajas de Ahorros de Castilla y León y de su sociedad de inversiones, Madrigal, "es la extinción", porque las entidades de la Comunidad dejarían de tener un interés "en común", en palabras del vicepresidente.

En Castilla y León, además de la fusión de Caja Duero y Caja España, Caja de Burgos se ha integrado en el grupo Banca Cívica con entidades de Navarra y de Canarias.

Tomás Villanueva ha defendido el "proyecto de Comunidad" consensuado hace dos años entre la Junta, el PP, el PSOE, sindicatos y patronal de Castilla y León, para integrar al mayor número posible de las seis cajas de la Comunidad, algo que "todavía es posible".

Por ello, "si el proyecto de Comunidad" pasa por unirse las cajas de Ávila y de Segovia con Caja Duero y Caja España para después sumarse a la fusión Caja Madrid-Bancaja, "nosotros encantados".

Sin embargo, "no nos gustaría perder dos cajas de Castilla y León en una operación de rescate de última hora", para "acabar así tras dos años de trabajo", ha concluido el vicepresidente.

Villanueva ha hecho estas declaraciones tras la firma de un acuerdo con el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.