Demasiado chapucero para ser real

La denuncia sobre supuesto espionaje político presentada en sede judicial por los concejales Miguel Domínguez, Silvestre Senent y Emilio del Toro, revelaría, de ser cierta, conductas tan grotescas que son difíciles de digerir. ¿Es verosimil que, si el objetivo era realizar grabaciones y escuchas ilegales en el acto protagonizado por Rita Barberá, los policías decidieran aparcar su llamativa furgoneta de lunas tintadas frente a la misma sede del PP?

Al mismo tiempo, ¿los conspidores hubieran escogido como agente secreto a un policía que efectuó durante mucho tiempo labores de escolta de un muy alto cargo del Consell arriesgándose a que fuera fácilmente reconocido? O el espionaje ha sido muy chapucero o el PP ha llevado demasiado lejos la denuncia arriesgando una operación policial que nada tiene que ver con este partido. La juez dirá.

El sueldo televisivo de Belén Esteban enciende los ánimos

Las redes sociales echaban ayer humo con miles de comentarios acerca de los supuestos ingresos anuales de la estrella televisiva más rutilante del momento: Belén Esteban. Nada menos de 1,2 millones de pesetas. La cifra, frente la gravedad de la crisis económica, es tan expresiva que a nadie deja indiferente.