El Gobierno valenciano modificará el Estatut d´Autonomia para reclamar una inversión de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) acorde a su población, lo que supondría recibir 600 millones de euros más de las cuentas estatales del próximo ejercicio.

La Generalitat pedirá al Estado que mantenga esa inversión por un periodo de siete años, el mismo plazo que en materia de financiación exige el Estatuto catalán, lo que permitiría cubrir el «déficit histórico» del Gobierno central con esta autonomía y que el Consell cifra en 3.000 millones de euros.

Así lo anunció ayer el vicepresidente económico del Consell, Gerardo Camps, en una rueda de prensa para analizar el proyecto de ley de los PGE para el próximo ejercicio, en la que lamentó que el Ejecutivo socialista haya decidido cumplir con las disposiciones incluidas en los estatutos de comunidades como Cataluña «sea cual sea la realidad económica» y pese a no estar «vinculado legalmente».

Ante esta situación, la Generalitat introducirá una disposición adicional en el Estatuto valenciano que, en términos similares a otros textos estatutarios, reclamará «inversiones estatales acordes al peso poblacional de la Comunitat Valenciana, recibiendo recursos extraordinarios que compensen el déficit histórico que en la comunidad aparecen», precisó.

El conseller de Economía criticó que la Comunitat Valenciana recibirá de los PGE para 2011 el 9,2 por ciento de la inversión prevista para el conjunto de las autonomías cuando, dijo, esta autonomía representa el 10,9 por ciento de la población estatal y aporta el 9,7 por ciento del producto interior bruto (PIB) nacional.

Camps recordó que el Tribunal Constitucional determinó, en su dictamen sobre el Estatuto de Cataluña, que la disposición adicional tercera —que reclama una inversión igual o superior a su aportación al PIB estatal— «no vinculaba» la decisión de las Cortes Generales ni la del Gobierno a la hora de confeccionar los PGE.