El conseller de Solidaridad, Rafael Blasco, justificó ayer el hecho de que casi un tercio de la subvención de 1,6 millones a la Fundación Cyes para dos proyectos en Nicaragua se destinara a gastos de asesoramiento en que este tipo de entidades, salvo "muy pocas" ONGD, como Cruz Roja o Unicef, "auténticas multinacionales de la cooperación" con "miles de funcionarios" a su servicio, "no tienen estructura propia y, para hacer un proyecto, necesitan externalizarlo". "Es lo habitual en el 90% de las ONGD de la Comunitat Valenciana", defendió Blasco, quien insistió en que las organizaciones no gubernamentales de "tipo medio y bajo" no cuentan "con los medios" de las grandes, de forma que, para "todos los trabajos de consultoría, planificación del proyecto, ingeniería, arquitectura, tienen que recurrir a asesorías externas".
"Aunque parezca exagerado desde el punto de vista económico, no lo es; si ven los expedientes del resto de ONGD, incluidas las dirigidas por miembros del PSPV, es lo habitual", argumentó el también síndic del PP en las Corts, tras la reunión de la junta de portavoces. "Hay ONG que tienen una o dos personas, por lo que tienen que recurrir a instancias externas para que les hagan los informes y la planificación", comentó, para añadir que, "si la solidaridad sólo la tuvieran que hacer siete u ocho" organizaciones, las más potentes, no se habría logrado, como en Valencia, "diversificar" el sector, "con 108 ONG" operando.
Tal como publicó este periódico, un entramado de fundaciones y ONG ha recibido subvenciones por 4,3 millones, de los que 1,4 se destinó a consultoras de dirigentes de estas mismas entidades. En el caso de los proyectos de Nicaragua para llevar agua y mejorar el cultivo del arroz, unos 500.000 euros se habrían ido en asesorías. El PSPV ha denunciado que la mitad del dinero lo dedicó la fundación a la compra de locales en Valencia. Un documento sin cuño de la conselleria justificó el cambio de las facturas de los pisos por otras.
Política "modélica en el mundo"
Ayer, Blasco sostuvo que su departamento trata con la "máxima objetividad" las ayudas al tercer mundo y llegó a calificar su política de cooperación internacional de "modélica en el mundo", para denunciar que el expediente sobre Nicaragua que tiene el PSPV está "trucado y falseado". "Es un montaje insidioso" del PSPV, sostuvo el conseller, que no obstante apuntó; "Si hay algún problema, ya lo dirá la fiscalía". Además, avanzó que ha enviado un escrito a la secretaria de Estado de Cooperación, Soraya Rodríguez, quien el martes exigió explicaciones al Consell, en el que la invita a comparecer junto a él en las Corts. Él, dijo, dará "todas las explicaciones" pero también la interrogará por aspectos de su gestión o la de la actual secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, en su etapa como responsable de la Cooperación. En concreto, sobre "las subvenciones que recibía la ONG a la que pertenecía Leire Pajín y otras directamente vinculadas con el partido socialista conocidas en toda España". La prueba de que el expediente está "perfecto" es que "ninguna ONG ha presentado ninguna queja ni recurso", dijo.
"No conozco a Adolfo Soler"
El conseller negó que exista entramado alguno para captar subvenciones de cooperación, así como cualquier vinculación con los responsables del Partido Social Demócrata (PSD), creado en 2006 para debilitar al PSPV a partir de la Unión Social Demócrata, formación impulsada desde el PSI montado en su día por los Blasco en la Ribera. "No conozco al señor Adolfo Soler", respondió en referencia al "número dos" de la red de ONG. Soler es el vicepresidente de la Fundación Solidaria Entre Pueblos, matriz del entramado que recibió 4,3 millones en subvenciones, y participó en la organización del PSD. Además, era el administrador de Lonerson, la firma "dormida" a la que Blasco, siendo conseller de Bienestar Social, dio en 2002 el contrato de los centros para mujeres maltratadas por 6,7 millones.
La Fiscalía investiga el caso de los pisos
La fiscal jefe de Valencia, Teresa Gisbert, decidió ayer abrir diligencias de investigación para esclarecer la supuesta compra de pisos por parte de la Fundación Cultural de Estudios Sociales (Fundación Cyes) con cargo a dos proyectos de cooperación en Nicaragua subvencionados por la Generalitat, según confirmaron ayer fuentes próximas al caso. Gisbert remitió el asunto al fiscal delegado de Delitos Económicos y Anticorrupción, Jesús Carrasco, para que se haga cargo de las pesquisas. De momento, el fiscal sólo va a investigar la denuncia interpuesta hace una semana por el PSPV, que sólo se refería al caso de los pisos.
Fuentes de la Generalitat dudan de que la denuncia tenga recorrido judicial dado que el expediente que en estos momentos se encuentra en la conselleria tendría los documentos que acreditan la exigencia de la devolución de las ayudas.
De ahí que Blasco se mostrará tan contundente en su comparecencia ante los medios y esgrimiera certificados en los que constaba que no se admitían los pisos como justificante de las ayudas. Con todo, este papel carecía de registro de salida y membrete oficial.
Los socialistas denunciaron la semana pasada en la Fiscalía la subvención de más de 1,6 millones de euros concedida por el Consell para abastecer y tratar agua para el consumo humano y producir alimentos en Nicaragua y que supuestamente terminó destinándose a la compra de pisos en Valencia.
El conseller Blasco señaló ayer tras conocer la decisión de la Fiscalía que confía en la acción de la justicia para poner freno «a los difamadores y a los que traman una campaña de intoxicación y de desprestigio contra la cooperación valenciana». El conseller añadió que «en política no todo vale, como está dispuesto a hacer el PSPV-PSOE».
Blasco dijo el viernes que se irá a casa si el fiscal halla irregularidades en el expediente de la Fundación Cyes.
El conseller insistió en que la Generalitat no había dado ni un solo euro para la adquisición de inmuebles y mostró un documento sin sello oficial.
